Om...
- Inhalen... Exhalen... y levanten su cuerpo como si estuvieran saludando al sol...
Estoy en mi clase de yoga kundalini y la maestra Shandra nos hace colocarnos en la posición de la serpiente. Inhalo y exhalo como me dice y sonrío como bobo al lograr una posición perfecta.
- Muy bien, Christian - me felicita estirando un poco más mi espalda - Recuerden todos que esta posición fortalece los abdominales y el sistema inmunológico. Ahora bajen y lentamente vamos con la postura del niño. Eso, bajen sus cuerpos y flexibilicen la columna. Con esta posición revitalizan mente y cuerpo. Aumentando el autocontrol de tus emociones.
El sonido del cuenco que se escuchaba tras la voz de la maestra me relajaba y hacía que las posiciones fluyeran como un caudal de energía a mi alrededor.
Desde la vez que esa chica me despertó de mi estúpido sueño, había decidido salir de esa vorágine de encuentros sexuales sin sentido y me transformé en un verdadero monje tibetano. Había retomado mis estudios y esta