Capítulo 88: Susurros entre los muros

El cielo de Theros se cubría con un gris tibio, una mezcla entre nostalgia y calma antes de una tormenta que nadie se atrevía a nombrar. En los jardines imperiales, el viento mecía las ramas con un ritmo lento, como si incluso la naturaleza intentara contener la respiración.

Violeta caminaba entre los rosales que bordeaban la fuente central, las manos ocultas entre los pliegues de su vestido azul oscuro. El mismo color de la tinta con la que, durante la madrugada, había escrito una carta que aún no se atrevía a enviar. Una carta dirigida a alguien que ya no podía leerla: Elian. Su muerte, aunque aún cubierta de misterio, había abierto más heridas de las que ella podía admitir.

Pero esa mañana no había sido él quien había visitado sus pensamientos. Era Leonard.

Desde que le ofreciera su mano —una vez, y luego otra— Violeta había comenzado a ver grietas en su armadura emocional. El príncipe ya no era solo el heredero. Ya no era el joven altivo que la había humillado en banquetes pasados
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App