POV: Cataleya
El sol de México pega sabroso por la ventana, pero yo ando con el corazón apretado desde que supe que Isa está delicada. Me tiro en la cama con el celular en la mano y le doy grabar al videomensaje.
—“Isa, mi amor… tú sabes que yo no sirvo pa’ dramatismos, pero me tienes el alma en la garganta. Te necesito fuerte, mami. Aquí te extraño, Máximo también. Y cuando salgas de eso, te juro que te voy a abrazar tan duro que te va’ molestar. Te amo.”
Lo envío y me quedo un segundo respirando. De una, Máximo entra al cuarto.
—¿Ya le mandaste mensaje?
—Sí —le digo—. Se oye estable, pero tú sabes cómo uno se queda…
Él se sienta a mi lado, me pasa el brazo por encima. Se siente nervioso, aunque disimule con su carita de jefe.
—Adrián me escribió anoche —dice—. Me dijo que el tratamiento empezó bien, pero que el doctor quiere cero estrés.
—Eso es lo único que me preocupa… Isa sin poder moverse.
—Conociendo a Adrián, la va a tener cuidada como si fuera de cristal —me responde.
Me le q