ANDY DAVIS
—No importa que seas su padre, sigues siendo un desconocido, y no dejaré que te los lleves a quién sabe dónde —agregué tajante, queriendo terminar la discusión en ese momento.
—Pero… no es un desconocido —dijo León con el ceño fruncido.
—Es papá —agregó Victoria ladeando la cabeza como si no comprendiera mis palabras.
—Además, no irán solos conmigo, no pienso llevármelos sin ti —interrumpió Damián con esa seguridad aplastante—. Velo como una salida familiar. Hasta te compraré un helado si prometes portarte bien.
—¿Cómo dices? ¿Portarme bien?