Capítulo 58.
—¿De Crown?— la pregunta de Phiama hizo que su novio la tomara de la mano, en una señal de no continuar. —Lo lamento. Es un placer, Harper.
Extendió la mano, esperaba algún reproche o que se mostrara rencorosa ante lo ocurrido recientemente. No obstante, la pelirroja atrapó su mano con total amabilidad.
—Siempre lo será— contestó, tratando de alejarse de su marido. Su cercanía la tenía muy nerviosa, pero Mateo no tenía planeado soltarla.
—Supongo que tienen mucho para ensayar, pero pueden ir conociéndose— animó el hombre que sostenía a Phiama. —Que mala educación. Harper, discúlpame. Wyatt Finneghan, —extendió la mano. —Un verdadero honor conocerte.
La inglesa tomó la mano con la misma careta noble, aunque Mateo había comenzado a leer algunos gestos, aún con lo buena actriz que ella era.
—¿Desayunaste?— la mujer de cabello rojo lo observó por un segundo.
—No, pero no estoy en condiciones de salir— mostró su imagen. Mateo llamó a Beagle, quién se quitó el abrigo que la cubrió