Catalina
El lunes llega más pronto de lo deseado y con este la reunión en Industrias San Román y cómo si de una broma del destino se tratara, las cosas empezaron a ir mal desde el inicio.
Para empezar, se suponía que Julian llegaría el domingo en la noche, pero su vuelo se corrió y como consecuencia ahora no tengo con quién dejar a Samuel, mientras Nat y yo vamos a la reunión, por lo que no me queda de otra que llevarlo conmigo y rezar para que quiera quedarse en la guardería de la empresa.
—Puedo quedarme con él—me dice Nataly por tercera vez y aunque en un momento consideré ir sola a la presentación, lo cierto es que la necesito.
No puedo proyectar las diapositivas, entregar el material, hablar de la propuesta, tomar los apuntes y responder las preguntas al mismo tiempo y aún si pudiera no daría la mejor imagen.
Walter, mi encargado de costos y finanzas también estará presente, pero no es lo mismo.
Además el trabajo de Nataly no es cuidar a mi hijo, eso es mi responsabilidad.
—Lo sé,