Capítulo 19 —... no después de él

Narrador:

El silencio en la habitación no era descanso. Era castigo.

Cleo se había salido del baño al escuchar que Neron abondonó la habitación. Se volvió a recostar en la cama, aún con el cuerpo ardiendo por caricias que nunca llegaron a consumarse. El encaje del conjunto, que Nerón le había dejado, seguía sobre su piel, y aunque ahora estaba cubierta por la bata que encontró, sentía cada centímetro de su cuerpo expuesto, como si todavía estuviera frente a él. Se llevó una mano al cuello, allí donde su aliento la había marcado sin dejar huella.

—¿Qué carajos fue eso…? —susurró al techo, sin esperar respuesta. Su voz le tembló. —¿Quién demonios hace eso? Me compra... me toca como si me deseara... y después me deja como una estúpida parada ahí...

Cerró los ojos, con rabia. Pero no por él, por ella misma, por haber temblado, por haber deseado que no se detuviera.

Del otro lado del hotel, en un rincón privado del bar, Nerón bebía whisky sin hielo pero, ni