Capítulo 93. La felicidad no se va a escapar.
Shane Robinson
La gala es más grande de lo que imaginé, se siente como si toda la ciudad nos estuviera mirando. Pero lo que hicimos aquí no fue pequeño, y es evidente para todos.
Los últimos meses han sido toda una locura, llenos de trabajo, de fechas pendientes, de construcciones llevadas a término, pero ya estamos aquí.
Con un sueño cumplido.
Tomo la mano de Ivy mientras avanzamos por la alfombra, algunos nos saludan y otros solo asienten con la cabeza, con esa mezcla de respeto y curiosidad que nunca me había importado hasta que la sentí con mi hermosa mujer de la mano.
Lo único que me importa es que ella esté bien, que se sienta segura, que sepa lo que hicimos juntos, al fin, después de tantos años mirándolo a la distancia y ansiando cambios.
Los flashes de las cámaras nos nublan la vista, pero yo no dejo de mirar a Ivy cada vez que puedo.
—Estás preciosa —susurro cuando entramos al gran salón donde se hará la clausura del proyecto del ayuntamiento, sin interesarme en que to