Estaba muy enojada y ofendida por la actitud de esa chica, pero ya no había nada que pudiese hacer, fue mi hijo quien metió la pata al acostarse con una mujer mucho menor que él y extranjera. Así que como ya la temperatura del bebé estaba bastante calentita, lo desnudé porque quería comprobar que era mi nieto. Era gracioso ver que este bebé era una copia exacta de mi hijo y eso lo supe en el primer momento que lo vi, sin contar que tenía los ojos de mi esposo, pero había una marca de nacimiento, la familia Pávlov, que el niño debía tener. Y así era, debajo de su axila estaba una especie de marca color marrón, la cual resaltaba muchísimo con su piel pálida… ¡Bienvenido al mundo, bebé! Eres mi primer Nieto, comencé a vestirlo y me encantaba cómo le quedaba esta ropa, no sé qué tanto sabes sobre el cuidado de un niño, pero se supone que tanto tú como él deberían de estar de reposo aún.
—respire profundo cuando mi madre le dio la bienvenida a mi hijo, porque sabía que, aunque estuviese m