Nicolás: —¿En serio?
Daniela asintió: —En serio.
Nicolás se agachó y le habló al bebé: —Bebé, tienes que patear más suave a tu mami.
El doctor sonrió: —Los futuros papá y mamá tienen muy buena relación.
Daniela se sintió un poco tímida.
El doctor: —Para el niño, si el padre ama entonces la madre está tranquila, si la madre está tranquila entonces el hijo está seguro, si el hijo está seguro entonces la familia está en armonía. Así que el amor entre papá y mamá determina toda la vida del niño. No importa que el niño ahora esté en el vientre de mamá, el niño ya puede sentir el amor de papá y mamá.
Daniela miró a Nicolás y se dio cuenta de que él la había estado mirando fijamente.
Su mirada era muy profunda. El corazón de Daniela dio un vuelco, no sabía en qué estaba pensando ahora.
El doctor finalmente dijo: —Mamá embarazada, cuando regrese aplíquese más aceite para estrías. Además de amar al niño, también tenemos que amarnos a nosotras mismas.
Nicolás: —Gracias, doctor.
Diciendo esto, Ni