El Heredero del Jeque. Zamir Voss

El Heredero del Jeque. Zamir VossES

Romance
Última actualización: 2025-10-13
S. Lorie  Completo
goodnovel16goodnovel
10
1 Reseña
56Capítulos
535leídos
Leer
Añadido
Resumen
Índice

Sarada nunca pensó que volvería a cruzarse con Khaled Al-Sayed, el magnate detrás de un imperio automotriz y dueño de Zafirya, el hombre que le rompió el corazón. Durante casi cinco años, ha criado sola a su hijo, Zamir, sin imaginar que el destino la obligaría a buscar ayuda en la última persona a la que querría ver de nuevo. Cuando Khaled descubre la verdad, todo el compromiso junto a su prometida la cual no ama, comienza a tambalearse. Aunque está a punto de casarse con la mujer que todos consideran la pareja perfecta para él, hay algo en su interior que nunca ha logrado apagar. La chispa de lo que una vez sintió por Sarada más ahora al descubrir que existe una personita que los une de por vida. Su hijo el heredero, Zamir Voss.

Leer más

Capítulo 1

1. Traición inesperada.

  

Sarada observó la prueba de embarazo en sus manos. Dos líneas marcaban su destino, su futuro. Sonrió levemente. Pronto le daría la gran noticia a Khaled. Sin embargo, una ligera ansiedad se instaló en su pecho. No sabía cómo él reaccionaría.  

Con suavidad, tomó su hiyab que no le gustaba usar, sin embargo no tenia opción,  lo colocó sobre su cabello, asegurándolo con delicadeza. Luego, se perfumó con una fragancia suave y floral antes de aplicarse un poco de maquillaje. Quería lucir hermosa para él, quería que ese momento fuera especial.  

Tomó su bolso y salió del apartamento donde había estado viviendo en ese país. Su corazón latía con fuerza mientras marcaba el número de Khaled. Sin embargo, él no contestó. "Debe estar ocupado", pensó. Después de todo, llevaba más de un mes sumergido en su trabajo como presidente de Sayed Auto Group, la empresa automotriz que sus padres le habían dejado a cargo.  Ya que el no quería el papel de ser Jeque de su familia.

—Hoy se lo diré en persona— murmuró con determinación. También necesitaban hablar sobre otro asunto importante. Su pasaporte estaba cerca de vencer, y si Khaled la amaba tanto como decía, tenía que ayudarla a encontrar una solución para quedarse.  

Al llegar a la imponente torre empresarial, entró y se dirigió al elevador. Al llegar al último piso, se encaminó a la recepción, donde una secretaria la recibió con una expresión de evidente desinterés.  

—Quisiera hablar con el señor Al-Sayed— mencionó Sarada con voz firme.  

La secretaria arqueó las cejas y la miró con superioridad.  

—El señor está muy ocupado, no creo que pueda atenderla.  

—Dígale que Sarada ha venido. Tal vez así sí me reciba.  

La mujer la miró con escepticismo.  

—¿Sarada? Lo siento, pero no me suena su nombre. Tal vez usted es una más de tantas mujeres que han venido a buscarlo. No es la excepción.  

Sarada sintió un nudo en el pecho. Tal vez la estaba juzgando por ser extranjera. Se encogió de hombros y decidió esperar de pie.  

Pero entonces, la puerta de la oficina de Khaled se abrió. Él apareció acompañado de una mujer que lo abrazaba con confianza. Sarada sintió que el mundo se detenía por un segundo. Su garganta se secó.  

—Hola —murmuró, con la esperanza de que Khaled reaccionara al verla.  

La mujer a su lado la observó con curiosidad y luego, con voz melosa, se dirigió a él:  

—Tienes visita, amor.  

Sarada sintió un escalofrío recorrer su espalda. ¿Amor? Khaled la miró y suspiró.  

—Puedes pasar — indico, su tono era seco.  

Sarada entró con pasos rápidos, su corazón palpitando con fuerza. Cuando la puerta se cerró, lo miró con incredulidad.  

—¿Qué es esto? —preguntó con un nudo en la garganta.  

Khaled chasqueó la lengua, visiblemente molesto.  

—Cálmate, Sarada. No vengas a hacer un escándalo aquí.  

—¿De qué hablas? —su voz se quebró—. ¿Te olvidaste que soy tu prometida?  

Khaled desvió la mirada.  

—Lamento decirte esto, pero lo mejor que puedes hacer es regresar a tu país.  

Sarada sintió que el aire le faltaba.  

—¿Regresar? Estoy aquí contigo. Vine a este país para estar a tu lado.  

—Lo nuestro no puede continuar. Ya me cansé de este jueguito.  

—¿De qué jueguito hablas?  

Él se pasó una mano por el rostro, exasperado.  

—Sarada, no te amo. Lo nuestro solo fue una aventura. Me aburrí.  

—¿Qué? —susurró, sintiendo que el suelo bajo sus pies temblaba.  

—Tú y yo no podemos estar juntos. Olvidas la clase de hombre que soy y la clase de mujer que eres.  

Sarada sintió un mareo repentino. Se sostuvo de la mesa, pero su orgullo herido la impulsó a mantenerse firme.  

—¿Estás diciendo que me estás dejando?  

—Sí —Khaled la miró con frialdad—. No pertenezco a tu mundo, ni tú al mío. Soy un jeque, y necesito una esposa digna, distinguida, de la élite de mi país.  

Sarada sintió que su dignidad se rompía en pedazos. Se enderezó y lo miró con furia.  

—¿Te has vuelto loco? ¿Qué clase de basura estás diciendo?  

Khaled sacó un cheque y lo deslizó por el escritorio.  

—Aquí tienes. Lárgate de mi país. Considera esto un pago por los meses que estuviste conmigo. Tu servicio sexual, te la estoy pagando.

Sarada miró el cheque. La cantidad era obscena. Un nudo de rabia y tristeza le apretó la garganta. Como era posible que el la tratara como si fuera una prostituta necesitada de dinero.

Una lágrima solitaria resbaló por su mejilla y cayó sobre el papel. Iba a romperlo, pero luego, con una sonrisa cínica, lo tomó.  

—Sabes, iba a destruirlo… pero tienes razón. Fui tu prostituta por  meses. Al menos esto me servirá para salir de este maldito país.  

Khaled apretó la mandíbula.  

—No uses ese tono aquí.  

—Te odio, Khaled. Eres despreciable. Eres una m****a asquerosa, que ni pisando deja de serlo.

—Ten un poco de dignidad. Sobre todo ten en cuanto que una mujer de tu estatus social no puede pertenecer a mi mundo.

—Ya, veo. Si hubiera sabido eso, crees que hubiera venido a quedarme como turista, por ti, deje mis estudios y te seguí.

—No me interesa. Olvídame.  

Ella se acercó y lo encaro. Pero Khaled la miraba con frialdad.

—Dime mirándome a los ojos que no me amas. — Expreso ella acariciando el rostro del hombre. Por un momento miró una chispa en sus ojos, el tipo la tomó del cuello y la beso suavemente y luego se alejó de ella

—Solo fuiste un pasatiempo. No te das cuenta que eres una mujer fácil. Date a respetar — Espetó con frialdad. Sarada enojada le propino una cachetada que resonó dentro de la inmensa oficina. 

—Te odio. Eres una escoria—  Vocifero la rubia golpeando el pecho del hombre que ella pensó la amaba.

—¡Basta! Entiendelo no te amo. Solo quería pasar el rato y lo conseguí, ahora lárgate. — declaró soltandole los brazos con brusquedad.

Sarada lo miró con el alma destrozada. Se giró sobre sus talones y salió de la oficina, azotando la puerta con fuerza.  

Las miradas curiosas de algunas mujeres en la recepción la atravesaron, pero ella levantó la barbilla con orgullo y caminó apresurada hacia la salida.  

Cuando pisó la acera, sintió que el aire le faltaba. Las luces del semáforo parecían difusas. Se apoyó en un árbol, y sin poder contenerse más, rompió en llanto.  

—¿Cómo fue posible que le entregué mi amor a un hombre como él?— mencionó con un nudo formándose en la garganta.

Se llevó una mano al vientre y lo acarició con ternura.  

—No necesitas un padre, pequeño. Solo me necesitas a mí.  

Al notar las miradas sobre ella, frunció el ceño. Un hombres la observó con curiosidad, y con rabia, ella murmuró en su idioma .

—Verdammter Bastard... Ich werde dich niemals verzeihen  

El hombre que la observaba frunció el ceño, sin entender del todo lo que ella decía. 

Ella, se encogió de hombros y levantó la mano para detener un taxi. Subió sin mirar atrás.  

—Lléveme a la residencia sultán tower.

El conductor asintió, y el vehículo se puso en marcha. Sarada apoyó la cabeza contra el cristal, sintiendo cómo su mundo se derrumbaba.  

Pero esto no terminaría aquí. No. Khaled se arrepentiría de haberla tratado así.  Y peor jamas conocería al bebé que crecía en su vientre.

Desplegar
Siguiente Capítulo
Descargar

Último capítulo

Más Capítulos

También te gustarán

Romances Relacionados

Novos lançamentos de romances

Último capítulo

user avatar
Salyspears
Súper intenteresante me gusta
2025-10-18 08:24:30
2
56 chapters
1. Traición inesperada.
2. Embarazada y Sola.
3. Como un ángel.
4. El pequeño Zamir
5. Un amor no correspondido.
6. Casamiento sin amor.
7. Una mujer capaz de todo.
8. Advertencia.
9. Sufrimiento de una madre.
10. Dolorosa verdad.
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP