Mundo ficciónIniciar sesiónÉl caminó directo hacia ella, con una mirada en sus ojos de una intensidad cruda y victoriosa.
— Luce, eres increíble, pero estoy aburrido — dijo él en voz alta, con la arrogancia de un hombre que se siente superior a su entorno.
La tomó del brazo en un agarre que comunicaba la urgencia de su misión.
— Vamos, me aburren estas máscaras, llevemos la fiesta a otra parte en donde podamos hacer… cosas, tú y yo, esto se ha vuelto de pronto muy aburrido, ¡Curas! No saben de fiestas — Dijo asegurándose de que mucha gente lo escuchara y luego le susurró algo más al oído — ¡Misión cumplida, larguémonos de aquí! — Con su aliento cosquilleándole en el cuello.
Luciana asintió, sus propios ojos brillaban con la adrenalina.
Vio a Visconti al otro lado del salón, absorto en una conversación con Greco, por ahora, estaban a salvo.
La huida fue tan rápida como la infiltración, se deslizaron a través de la multitud, sus despedidas fueron superficiales, y







