Las redes sociales ardían. Todo el país estaba pegado a sus pantallas, viendo una y otra vez el nuevo video que acababa de filtrarse. Un clip breve pero impactante: Aitana Alarcón, con el rostro serio y decidido, levantaba una pistola y le disparaba a Nicolás Valverde. La imagen era clara y demoledora, mostrando a Nicolás cayendo al suelo, aparentemente sin vida.
**"Aitana Alarcón: ¿heroína o villana?"**
**"¿Intento de asesinato? La verdad detrás del disparo"**
**"La caída del imperio Alarcón: nuevas revelaciones"**
Los titulares no paraban de surgir, cada cual más sensacionalista que el anterior. La indignación crecía como una marea imparable en las redes sociales. Los mensajes de odio, los llamados a boicotear los negocios de la familia Alarcón, y las especulaciones acerca del futuro de su imperio económico llenaban las plataformas.
Mientras tanto, en una cabaña oculta entre las montañas, Nicolás y Helena vivían el caos de manera muy diferente.
—¡¿Qué demonios fue eso, Nicolás?! —gr