El invierno había vestido York con su mejor gala: calles cubiertas de escarcha, luces navideñas titilando en cada esquina, y un aire festivo que parecía envolver incluso los edificios más sobrios. La Navidad estaba a solo unos días, y como cada año, Janix M Group preparaba su tradicional celebración de fin de año. Pero esta vez, sería diferente.
James había reservado el salón *Rosewood Hall*, un espacio exclusivo con ventanales que daban a un jardín iluminado por miles de luces blancas, donde el cristal, el mármol y el silencio elegante hacían que todo pareciera sacado de una postal. La invitación, diseñada con papel italiano y detalles en oro, había sido enviada no solo a sus empleados, sino también —por primera vez— a la familia Moore.
Su abuela, Evelyn y Gregory, Noah… todos sabían ya que James era el CEO de Janix M Group. Incluso se había tomado el tiempo de enviar dos invitaciones especiales hasta Francia: una para Camille, y otra para Lucie, con una nota escrita a mano que d