152. CLÍO Y LEONARD
David llegó con Gloria y las niñas bien temprano. Lúa llamó para decir que necesitaba vernos con urgencia y le pidió a Leonard la mañana libre. La empresa está prácticamente vacía, por lo que Leonard ha decidido solo mantener los últimos trabajos que nos habían encargado y no recibir ninguno nuevo. Hemos tenido suerte de que eso haya pasado en este periodo en el que habíamos disminuido el trabajo con la intención de introducir los nuevos formatos de video e inaugurar los nuevos estudios. Nosotros todavía estamos en la cama.
—Leo, ¿seguro que la empresa va a estar bien, a pesar de que todos los inversionistas retiraron su dinero? —pregunto una vez más.
—Sí, cariño, tengo el dinero necesario en el banco —responde con seguridad.
—¿Y para qué tenías entonces a todos esos inversionistas y me volviste loca tratando de encontrar nuevos? —sigo preguntando, algo molesta por todas las cosas que me hiciste hacer.
Me mira como si se diera cuenta de lo que estoy pensando. Corre, me toma la