7. LOS ACCIDENTES
Nos adentramos en una sala de juntas repleta. La mayoría son hombres que, al verme, prácticamente me desnudan con la mirada. Una chica muy profesional hace las presentaciones. Cuando soy anunciada, me adelanto y hago mi presentación. Todo sale muy bien; al retirarse, los participantes felicitan a mi jefe y algunos a mí. — Muchas gracias, Clío, ha sido, como siempre, un trabajo impresionante —me dice mi jefe, sin perder su profesionalidad. — Gracias, señor, solo hago mi trabajo —respondo de igual manera. — Bueno, ahora que todo ha terminado, habrá una pequeña recepción en la planta baja. Relájese y vamos. Después, la llevaré personalmente a su casa —me habla respetuosamente, pero ni loca lo dejo llevarme; podría intentar algo al vernos solos en su coche. Por eso me apresuro a decirle: — No es necesario, señor. Tomaré un taxi. — Puedo llevarla, pero si lo prefiere así, no me voy a oponer —dice con la misma seriedad con que me ha tratado toda la noche.Estoy asombrada, realment
Ler mais