Así que para hacer las cosas más parejas lleve una de mis manos, mi pantalón para sacar mi miembro y comenzar a darle la atención requerida y es que esta mujer me ponía a mil. Estaba concentrado en ambas tareas, mi mano estaba mojada por todos los fluidos que estaban saliendo de mí, eso facilitada mi tarea. Por un momento la idea de olvidar todo e introducirme en ella cruzó a mi mente, pero la deseché de inmediato, jamás haría algo así. Por esa razón seguí aliviándome con mi mano, sentía que no podía más, justo en ese momento su cuerpo comenzó a convulsionar, anunciando así su próximo orgasmo. Cosa que yo aproveché, así que cuando grito mi nombre me coloque frente a su cuerpo, comencé a mover mi mano, más rápido y descargué todo de mí en su vientre—¡ahhh!
Cuando termine de hacerlo me senté de golpe en el sofá, recosté mi cabeza y cerré los ojos por un momento para tratar de calmar mi corazón. Pero hubo algo que me hizo reaccionar de golpe, ella había llevado su mano hasta mi miembro,