C11- TACOS DE CORDERO.
C11- TACOS DE CORDERO.
Aslan respondió el mensaje con pocas palabras. Claro. Paso en un rato. Y media hora después entró al Starbucks y lo vio de inmediato.
Damian estaba sentado cerca del ventanal, haciéndole señas, Aslan avanzó hacia él con el cuerpo tenso, como si cada paso le costara más de lo normal.
—Ey —saludó Damian cuando tomó asiento—. Pedí tu café favorito.
Dejó la taza frente a él.
Un espresso doble, intenso, sin azúcar.
—Gracias —respondió Aslan, serio.
Hubo un silencio incómodo y se miraron unos segundos sin decir nada, hasta que al final, Aslan habló primero.
—Damian... supongo que Isabella ya te contó que nos conocíamos. Y sé que eso es lo que querías preguntarme. Pero quiero que sepas que...
—No te preocupes —lo interrumpió Damian con calma—. Lo entiendo.
Aslan alzó la vista, sorprendido.
—¿Lo entiendes?
—Sí —asintió—. No estabas preparado para casarte. Lo hacías por el título de Alfa... y cuando ya no tuviste que cargar con eso, preferiste tu libertad. Es comprensibl