Capítulo 115. La Red se Cierra.
**Camilo**
Las luces de la madrugada entraban pálidas por las persianas del edificio donde teníamos la oficina de crisis. El equipo legal ya llevaba horas redactando y afinando el comunicado oficial. Pero yo sabía que la palabra no bastaba. No contra alguien como Juan José.
Él no jugaba limpio. Jugaba con la percepción.
Y esa era su mayor arma.
—¿Tienes la confirmación? —pregunté por teléfono.
La voz de Antonio, uno de mis contactos en la SIJIN, respondió:
—Sí. La geolocalización cruzada de redes y los movimientos de su asistente coinciden con tres sitios. El más probable: una productora clandestina en el sector de Laureles. Alquilaban fondos falsos para montar “videollamadas desde cárceles” y declaraciones virales.
—¿Se movió?
—No. Pero ya no está en el edificio. Su asistente salió esta madrugada con dos maletas grandes.
Fruncí el ceño.
—¿Destino?
—Se dirigieron hacia el norte. Posiblemente una finca o un nuevo escondite en Santa Fe de Antioquia.
Corté la llamada y miré el mapa digit