Se había formado una revolución en la torreta. Pude ver cómo los vampiros comenzaron a correr por todo el hogar. Los líderes de la Cofradía nos reunimos en un pequeño salón junto con Alicia.

Entonces Amara le preguntó:

—¿Estás segura de que puedes levantar el velo?

Alicia volteó a mirarla. Pude sentir en su memoria cómo no estaba segura. Ni siquiera tenía que entrar completamente en su cabeza para darme cuenta de eso.

—Ella lo hará —les dije a todos con seguridad—. Sabe cómo hacerlo.

No era una mentira del todo. Aunque en ese momento Alicia no supiera cómo hacerlo, ya me había comentado en varias ocasiones que la magia del hielo funcionaba de forma instintiva. Solo tenía que llegar con la voluntad de destruir el velo y lo haría.

Terminamos de organizar todo lo posible entre los líderes: las formaciones de los aquelarres y de las manadas.

—Es una formación arriesgada —dijo uno de los miembros de la Gente del Bosque—. Tenemos al menos seis puntos de salida de la grieta. No podemos asegu