“Burlesque”
NARRADOR OMNISCIENTE
El bar Burlesque alberga todo tipo de fantasías. Un sitio sublime, de lo más bajo y concurrido en Mónaco. Una discoteca inmensa repleta de salones y pasadizos dispuestos para todos los gustos.
Las personas se mezclan aquí. Concurren universitarios, deportistas, empresarios, los criminales... La diversidad es su fuerte. Un foco de baile, diversión y tragos exóticos pero también, un punto de reuniones.
El antro nunca está desprovisto de clientes, la música siempre es buena y el alcohol abunda al igual que las sustancias y el sexo.
No existe control etario, control de consumo ni control de prostitución. Burlesque es un mundo aparte dentro de Mónaco y lo seguirá siendo mientras su dueño esté al frente del negocio.
—Disculpa, ¿me sirves otro mimosa?
El barman se da vuelta de inmediato, colgando su franela al hombro enseguida que la suave y pecaminosa voz de semejante hembra le atraviesa los oídos.
—Claro.
La mira y no entiende cómo puede estar así de buena