A pesar del tiempo, mi corazón sigue esperando, obsesionado con tu cuerpo, con tu alma, con tu voz. Sin ti, se quedó a la mitad, sin salida, a medio vivir. Complétame, por favor.
Isabella
Me siento estancada, como si a pesar del tiempo yo continuara aferrada a la Isabella de veintiún años, a esa mujer ingenua que se enamoró como idiota de su jefe. He crecido profesionalmente, pero internamente, me siento marchita. Todo a mi alrededor continúa evolucionando y yo sigo aquí, adherida a un amor que jamás será mío y provocando que un hombre que realmente me ama, casi se mate.
Necesito avanzar, cambiar. En lo personal debo ser esa mujer que se pone de pie delante de una junta, o la que da la cara por su hijo con ferocidad. Este juego estúpido en el que permanezco como víctima debe llegar a su fin de una vez por todas. Ya no estoy encerrada, ni atada, ya no soy la huérfana que sufre el maltrato de su padre. Soy una mujer con cicatrices que debe de encontrar la manera de continuar.
—Celine se