Después de su reunión con el alcalde, Blake fue directamente a la oficina. Trataba de que sus obligaciones fueran su prioridad para no pensar en su esposa. No quería siquiera que se la nombraran, estaba tan decidido a no verla que no dejaría que su propia mente y mucho menos su cuerpo, lo traicionaran.
Apenas llegó su secretaria lo detuvo.
_ Señor Townsend, la señorita Stanton lo está esperando en su oficina _ lo miró algo asustada_. Disculpe sé que no le gusta recibir visitas inesperadas, pero no pude evitar que entrara.
El resopló y puso los ojos en blanco.
_ Está bien, no te preocupes. Traeme un café, y contacta a Henry. Necesito hablar con él _ dijo entrando a su lujosa oficina.
Rose estaba sentada en el cómodo sofá del espacioso e iluminado lugar, ojeando una revista. Al verlo la lanzó sobre una mesita y fue corriendo hasta donde estaba él.
_ Cariño… _ dijo ella abrazándolo _. ¿Cómo estás? He venido a verte porque estaba preocupada por ti… te fuiste de nuestra ca