Capítulo 97. Amor o capricho
Michael contestó al beso, metió las manos por su cabello y la acercó a él, intensificó el beso y metió su lengua en su boca, Guadalupe le correspondió con un gemido de satisfacción y lo abrazó pegándose a él.
Sin reparo Guadalupe subió a su cama y Michael siempre con la necesidad de respetarla sonrió y la mantuvo a distancia con los brazos estirados.
—No debemos…
Guadalupe notó que la puerta no tenía seguro.
—No hay nadie en casa, podría poner el pestillo…
—Guadalupe, sabes a qué me refiero. Por favor no lo hagas más difícil.
Guadalupe iba a retirarse, sabía que era lo que debía hacer, pero se aprovechó de que él no podía detenerla porque no podía verla.
Con cuidado y en silencio movió sus manos hasta su miembro.
Michael quería ser bueno, pero su necesidad de contacto ganaba, no puso resistencia.
Las manos de Guadalupe lo acariciaron y su miembro se puso como piedra y sacó su falo de los calzoncillos.
Frotó de arriba abajo.
—Eres todo talla grande, ne