En la mansión Almanza, después de dormir a los cachorros, Bruno continuaba con la bebita Bailey, por fin la había dormido, la acostó y la arropó, el Alfa la observó unos segundos más antes de salir a buscar a Rafaela para despedirse
La mafiosa salía de darse un baño envuelta en una toalla que apenas le cubría el redondo trasero, Rafaela se sobresaltó un poco al ver a Bruno de pié a un lado de su cama
Los... los cachorros ya se han dormido. - Bruno se aclaró la garganta, tenía tres meses que no tocaba a su luna, siendo un lobo y más aún un Alfa, eso era una verdadera tortura, los licàntropos eran demasiado sexuales y el estaba en abstinencia
Rafaela se acercó demasiado a él, Bruno por un momento pensó que su deseo por él por fin la habían hecho rendirse
Tú saco está mojado, Bailey babeo tu hombro mientras la arrullabas, quitatelo. - Rafaela son más, le quitó el saco al Alfa, el roce de sus manos hacía más difícil aún que se controlará
Si, esa pequeña cachorrita es un hueso demasiado du