El silencio cae como una losa entre las dos. Se escucha un reloj en alguna parte, el murmullo distante del jardín.
–Realmente pensé que la única malvada en esta historia era Kate… –Sophie respira hondo, la mirada fija, los ojos vidriosos. – Pero ahora veo que tú eres igual. O peor. Porque tú finges.
Ayslin parpadea, dolida, retrocede un paso. –Estás diciendo cosas sin sentido, Sophie. Jamás quise arruinar la boda de Amara y Liam, solo quería que él supiera la verdad. Y respecto a Esteban… –hace una pausa, buscando las palabras– no sabes cómo pasaron las cosas realmente. No es lo que tú crees.
Sophie suelta otra risa, seca, sin humor. –¿En serio vas a empezar con eso también? –dice, cruzando los brazos con fuerza. – Ya me lo dijo él. “No fue lo que parece.” –Hace una pausa larga, sus ojos se clavan en los de Ayslin. – Pero sí lo fue. ¿No?
Ayslin respira profundo, cierra los ojos un instante, y cuando los abre hay un brillo húmedo en ellos. –Tienes razón –dice, apenas un susurro. – No p