Capítulo 938
Incluso ese lazo clandestino había sido forzado por él mismo. ¿Le estaba permitido ambicionar algo más?

***

De vuelta en la ciudad, Luciana tomó un taxi directo a una agencia de detectives privados.

La habían llamado al amanecer: por fin había pistas sobre el caso de Mónica. Al teléfono no podían entrar en detalles, así que pidió cita inmediata.

—Doctora Herrera, adelante, siéntese.

—Gracias.

Luciana tomó la silla sin perder un segundo.

—¿Qué averiguaron? —preguntó con premura—. ¿Tienen pruebas nuevas?

El investigador, Alfonso López, se aclaró la voz.

—Decir “pruebas” es apresurado. —Levantó una ceja—. Sabe que el caso es enredado y las pistas son escasas; la misma policía quedó en blanco.

Luciana frunció el ceño.

—Entonces… ¿por qué me llamaron?

—Porque, al fin, apareció un hilo. —Abrió una carpeta y la deslizó hacia ella—. Échele un ojo.

Sobre el papel, varias anotaciones resaltaban en tinta negra.

—Esto —señaló Alfonso— es el historial de mantenimiento del auto de Mónica, desde el
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP