Narrado por Mia Blackwood
El día en la universidad fue un absoluto campo de batalla social. Julian, que tiene el tacto de un elefante en una cristalería, se había encargado de difundir el rumor de que éramos "la pareja del año". Cada cinco minutos alguien se acercaba a felicitarnos o a pedirnos una foto para sus redes sociales. Yo mantenía mi sonrisa de porcelana, pero por dentro quería gritar.
Y lo que más me irritaba no era Julian intentando rodear mi cintura cada vez que pasábamos frente a un espejo, sino el hombre que caminaba tres pasos por detrás.
Donovan no había dicho nada en toda la mañana. Ni una palabra sobre mi "nuevo romance", ni una queja por las tres veces que lo hice cargar mis libros pesados. Pero cuando salimos del campus hacia el coche, el silencio se rompió de la forma más inesperada.
—¿Se encuentra bien, pequeña pecas? —soltó Liam con una voz cargada de una ironía que no le conocía.
Me detuve en seco, girándome hacia él con los ojos encendidos.
—¿Cómo me has llama