El amanecer trajo consigo un silencio pesado. La tensión en el campamento era palpable, mientras los hombres de Samer comenzaban a organizarse tras una noche de guardia intensa. Khaled se acercó con un reporte en mano, su rostro grave.
—Hemos confirmado el nombre —dijo, entregándole a Samer un documento con la información recopilada—. Ahmed Mansoor es conocido por su actividad en redes internacionales. Pero no será fácil llegar a él. Está protegido.
Samer tomó el documento, examinándolo detenidamente.
—¿Protegido cómo?
—Cuentas bancarias en paraísos fiscales, movimientos limitados y una red de seguridad casi impenetrable. Si queremos atraparlo, necesitamos un plan sólido y aliados con recursos.
Samer asintió, su mente trabajando rápidamente. No había margen para errores.
—Reúne a los hombres clave. Necesitamos evaluar nuestras opciones antes de actuar.
---
Mientras tanto, Agatha se encontraba en su tienda, sentada frente a una taza de café humeante. Su mente giraba en torno a los even