Capítulo 11.6: Presagio.
―Lo único que me falta para estar en paz, es saber el motivo del ataque, pues, como saben, Guardianes de Plata y Luna Sagrada, son de las pocas manadas que tienen enemigos ―dijo negando suavemente con la cabeza ―Es por eso por lo que jamás entendí el motivo de aquel ataque tan bien organizado ―
―Bueno, creo que muy pronto lo descubriremos, deja que tu nieto se encargue de ello ―dijo Arsen girándose hacia Sandrine, quien se dirigía hacia ellos alisándose su uniforme ― ¿Qué tal si desayunas con nosotros? ―
―No lo creo Arsen, Giulia… ―
―Deja que Jonathan y Marianne la lleven a la habitación de huéspedes ―se apresuró a interrumpirlo Eleonor ―Más tarde podemos llamar a Bemus para ir todos juntos al café Deva ―
―Vale, me has convencido ―accedió Apolo con una amable sonrisa
―Excelente ―dijo Arsen ―Sandy, ¿te molestamos con un lugar más en la terraza? ―
―En absoluto su excelencia ―dijo Sandrine antes de volver sobre sus pasos con dirección a la cocina
―Venga, vamos ―dijo Arsen guiándolos por