―Si la vida de esa niña es perdonada, creo que no encontrarán padres más amorosos para cuidarla y protegerla. Esa niña no sólo estará a salvo con ellos, estará llena de amor y cariño, por lo que muy difícilmente podría convertirse en la amenaza que algunos temen ―
― “¿Máximus?” ―lo llamó Lancelot ― “¿Qué opinas?” ―
El rey, que hasta ese momento había permanecido en silencio, se levantó de su lugar, dirigió su mirada hacia Gael y después hacia Emmet.
Ninguno de los dos parecía dudar, más bien, parecían estar completamente decididos.
― ¿Están conscientes de lo que están ofreciendo? ―preguntó Máximus ―Esta niña es algo desconocido para todos, las posibilidades de que algo salga mal son infinitas ―
―Todo lo desconocido asusta, pero lo que es criado con amor suele salir bien ―dijo Emmet colocándose junto a Gael
―Y si algo llegase a salir mal, entonces, Em y yo nos haremos responsables ―
―No ―intervino Dante ―No sólo ellos se harán responsables de la niña… ―
―Asha ―lo interrumpió Gael
― ¿As