71. LAS CONFUSIONES.
Levi había despertado al día siguiente con un solo pensamiento en la mente; ver y hablar con Verónica. Ella se había ido hace un año sin despedirse de el, algo que le había dolido mas de lo que había querido admitir.
— Pide que investiguen en que hotel se está quedando Verónica Cox o Verónica Dixon —ordenó Levi King al salir de la habitación.
— Si señor —respondió el hombre que se encontraba frente a su puerta— Su padre ha enviado las invitaciones a la boda estaba mañana.
— Si, estoy al tanto.
Levi bajó a tomarse una tasa de café. Sus nervios por saber donde estaba Verónica aumentaban, pero sus pensamientos a veces se desviaba a la mujer con la que pronto se casaría.
Por otro lado, Verónica se había despertado aquel día sin ruido. Cosa que la extrañó, por lo regular Dom solía llorar casi todas las mañanas por hambre.
Verónica revisó la cuna y el pequeño bebé no estaba. Salió de su habitación en pijama, bajó las grandes escaleras a las que no estaba acostumbrada y los