Mamá.

Catalina abrió los ojos mucho antes de que el amanecer tiñera la mansión Delcourt, mientras la casa entera dormía sumida en ese silencio espeso y casi irrespirable que solo el peso de los secretos podía garantizar.

No había ruidos ni voces ni pasos en los corredores, porque todo parecía estático, suspendido en el tiempo, y sin embargo, su corazón latía con fuerza desbordada, como si intentara recordarle que aún estaba viva.

Esa mañana, no quería ser Catalina Delcourt, ni la empresaria que el mundo observaba con ojos calculadores ni la heredera que luchaba a solas por reconstruir un imperio familiar desmoronado, sino que esa mañana, más que ninguna otra, solo deseaba ser madre, una madre rota, pero madre al fin.

Se levantó despacio, cuidando de no encender las luces y permitiendo que la penumbra la envolviera mientras caminaba descalza por los pasillos infinitos de la mansión, como si el frío del mármol pudiera calmar el incendio de ansiedad que sentía ardiendo en su pecho.

Su plan era
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP