"Te Pertenezco" es la tercera parte de la Saga Desierto de Rosas. En esta entrega, la historia se contará desde la perspectiva de Patricio, y se mostrará tanto el pasado como el presente de la relación que tuvo con Darla. La trama se centrará en los altibajos de su relación y en los secretos que guarda su corazón, algunos de los cuales tal vez Darla nunca llegue a conocer. "Todas mis obras están protegidas por Derechos de Autor, cualquier plagio será denunciado legalmente" Número de Derechos de Autor: 1707112931947
Leer másSalir de Ontario asi, de un día para otro, solo porque mis padres lo quieren, me molesta; estoy cambiando mi vida completa en un segundo, tengo todo en mi ciudad y ahora a mis padres se les ocurre irnos a vivir a Estados Unidos, por sus negocios; obviamente mi hermano mellizo y yo tenemos que acompañarlos, perderé todo, a mis amigos y mi preparatoria, la chica que me gusta, todo ¡Qué frustración!
- ¡Oye hermano, es hora de irnos! - exclama Claude entrando a mi cuarto con su típico entusiasmo que me molesta un poco.
- Si, ya lo sé... - respondo molesto y frustrado viendo los CDs que no guardé en mi bolsón, todavía no decido cual escucharé durante el viaje, reviso uno seguido de otro y los voy acomodando en mi cajón mientras observó como Jason entra traz Claude y recoge mi maleta. Cuando decido que escuchar guardo lo demás en la caja, tomo mi bolso, Claude está esperándome en la puerta parado.
- Joven Patricio, apúrese sus padres lo esperan...- explica Jason saliendo por la puerta.
- Si, ya sé Jason, gracias - respondo poniendo los ojos en blanco, salgo de mi cuarto y bajo las escaleras molesto todavía, creí que estaré molesto con todo esto por un buen tiempo, la verdad es que no tengo ganas de hacer este viaje y de quedarme en otro país dejando mi país, mi ciudad y mi vida.
Claude baja las gradas más rápido me da un empujón cuando estoy por bajar los últimos escalones, el es todo lo contrario tiene un entusiasmo que hasta ahora no puedo comprender, llegó a la puerta, observo cómo mis padres y mi hermano suben a la camioneta y como Jason guarda las últimas maletas que quedan dentro de la camioneta, mientras yo camino a desgano y trepo a la parte trasera de automóvil.
- Deja esa cara, por favor, hijo - mi madre me mira inquisitivamente desde el asiento del copiloto - te gustará nuestra nueva casa y la nueva ciudad, vendremos de paseo.
-Esta bien mamá - respondo a regañadientes y me coloco los audífonos, me decidí por el CD de Rammstein, necesito levantarme el ánimo y el buen rock lo hará posible.
Jason entra a la otra camioneta y empezamos nuestro viaje, que la verdad no dura casi nada, es cuestión de cruzar la frontera y aparecemos al otro lado del charco, en Buffalo - New York, mis padres compraron una casa en el Suburbio Eden.
Una media hora después observo desde la ventana, mi nueva casa es mucho más grande de la que tenía en Canadá pero eso todavía no me entusiasma demasiado aunque mi madre intenta que cambie mi rostro de molestia, sé que no es de su agrado pero tampoco puede obligarme a que me alegré estar aquí.
Entramos a la casa lo observo todo, dejo algunas cajas en la cocina y después entro a mi cuarto, las cosas que tenía están casi listas, obviamente hay que sacar de la cajas, a no ser de lo que trajimos en la camioneta, bajo las gradas me dirijo a la camioneta, saco las cajas que corresponden a mi cuarto y vuelvo a subir, las coloco en la cama y empiezo a abrir algunas cosas, unos minutos después mi padre entra al cuarto.
- Patricio, prepara tus cosas para mañana, no puedes atrasarte, así que empiezas clases muy temprano en la preparatoria...- al escuchar eso me molesto mucho más, no tengo ni un día de descanso, cansado de todo esto, no respondo nada, ¿Que podría responder a todo esto? tan solo muevo la cabeza asintiendo intentando que la molestia no se me note, mi padre sonríe satisfecho y vuelve a salir del cuarto son decir nada más.
-¡Joder! - chillo tirando la caja que estaba abriendo al piso.
Ese instante la puerta vuelve a abrirse abruptamente, es Claude.
- ¿Sigues molesto? - pregunta Claude, metiendo la cabeza con la sonrísa de idiota que siempre tiene.
- Por supuesto, no es fácil para nadie aparecer al otro lado del charco, ser un completo desconocido, no tener a nadie ni siquiera un amigo con quién conversar...
- ¡...Yo estoy feliz, conoceré nuevas chicas, seré el nuevo conquistador de Buffalo! - Exclama con orgullo.
- ¡Eres un imbécil...!- respondo con torpeza.
- ¡Miren al casto...! - exclama entre carcajadas - a este pasó te quedarás virgen...- comenta burlón.
- Cállate- chillo tirandole la almohada de mi cama, ese instante sale de mi cuarto riendo a carcajadas, me quedó más molesto todavía, ¡mierda! ser todavía casto no es un pecado, tengo 14 años, mi hermano mellizo solo quiere aumentar su lista de conquistas en todo lado donde vamos, le encanta estar tras las faldas de cualquier chica que se le crucé, se jacta de ello, yo tengo otro tipo de concepto del amor y de esos sentimientos que creo que Claude nunca podrá tener.
****
Es otoño, el comienzo de clases es inminente, como me dijo mi padre tuve que pararme muy temprano para empezar en la nueva secundaria, quiere hacer frío por lo que puedo notar al ponerme de pie, pero estoy acostumbrado, soy Franco canadiense y en Canadá hace frío casi todo el año.
Salimos de casa muy temprano por la mañana, caminamos unas cuantas cuadras, aunque no conocemos muy bien la ciudad nos ubicamos fácilmente llegamos unos minutos después frente de un gran edificio, Buffalo Grove Hight School, Entramos con Claude, en la puerta encontramos unos grandes papelografos donde revisamos los horarios y las clases.
- Camina Bro, tenemos que llegar a la primera clase, te tocó el aula 4 y a mí la 8, así que estaremos en distintos paralelos - comenta mirando el papel con atención.
- Si, que bien - respondo entusiasmado, me libraré del idiota por un tiempo.
Después de terminar de revisar empezamos a caminar por los largos pasillos de la escuela cruzando con varios adolescentes que hablan y hacen bulla como en cualquier secundaria, unos minutos después por fin llegamos al aula 4, la mía, me despido de Claude entro con los audífonos puestos todavía escuchando a Metallica a todo volumen, levanto la mirada para buscar un lugar donde sentarme en el pupitre del medio observo una visión en Jean y blusa rosada, está sonríente leyendo un libro de William Shakespeare, es una hermosa muchacha de ojos pardos que le brillan y cabello castaño, charla con el chico de atrás, ¿será su novio? Es como si cupido me hubiera flechado a primera vista.
- ¡...Ya Cris, déjame leer...!- exclama entre sonrisas.
- ...Pero Darla, dime de una vez, ¿te gusta el boceto que hice?
- A ver, muéstrame - agarra un papel que el chico le pasa - muy bien, vas mejorando - vuelve a posar sus ojos en Romeo y Julieta, debe ser romántica si le gusta esa clase de literatura.
No sé si soy muy obvio, tal vez me quedé petrificado en mi lugar mirándola, por qué unos minutos después logro que me mire, me analicé, mientras lo hace se relame los labios, eso me gusta, se nota que tiene los labios dulces...
- Hola - saluda poniéndose de pie y acercándose a mi, trago saliva, creo que estoy un poco sonrojado.
- Hola...- respondo acercándome a ellos y dejando mis cosas en el pupitre que está a su lado.
- ¿Cómo te llamas? - pregunta entusiasmada volviéndose a acomodar en su lugar- me llamo Darla Burkley, él es Cristopher Durtins - el chico me saluda efusivamente y le respondo de la misma manera.
- Mi nombre es Patricio Lerosse...- respondo sonriente, es la primera vez que sonrío en este nuevo lugar.
- No eres de acá ¿verdad?
- No, soy Franco canadiense.
- Oh, ¿de Ontario?
- Si, mis padres se vinieron por negocios a Buffalo.
- Muy interesante, bueno si recién llegaste, necesitas nuevos amigos así que aquí tienes dos.
- Gracias - sonrió, es la primera vez que me siento feliz de haber venido a Buffalo, "Labios dulces, esto es amor a primera vista"
Desde ese momento Darla, Cris y yo nos hacemos los mejores amigos, ella es muy dulce, no es como otras chicas, que se dedican a la banalidad, le gusta leer, le gusta escuchar música y dibuja muy lindo, Cris y ella son uña y mugre, se dedican a su mundo, a los libros y a Dibujar, mientras yo, estoy embobado con ella, pero como dice mi hermano, soy muy tímido y no me ánimo a contar mis sentimientos, ahora solo somos amigos, tal vez los mejores, hablamos horas por teléfono y caminamos de arriba abajo siempre juntos.
Desde el día que la conozco la amo, su cara, su sonrísa, su mirada, los pucheros que hace, son mi debilidad, es mi regalo que el cielo me dio, ¡La amo, fue amor a primera vista y siempre la amaré!
****
Quién iba ha pensar que ese día iba a conocer al amor de mi vida, Darla, ahora espera otro hijo mío, sí, digo "otro" porque sé que todas las veces que estuvo embarazada eran míos, hasta Dekran, sé que es hijo mío y no del detective, aunque lo suponía cuando me lo contó, tuve la certeza, cuando el detective privado que contraté para seguir a Darla me comunicó que Engels estaba mal después de la separación, tan mal, que estaba internado. Por fuentes confiables averiguó qué por la ingesta de tantas pastillas para el corazón, Engels era infértil desde hace unos años atrás, sus compañeros Jake y Judy lo sabían pero nunca lo contaron ni siquiera a Darla, por mi parte, por obvias razones me mantuve callado y es un secreto que me llevaré a la tumba, si ella se entera se alejaría de mí definitivamente, es un acto de alta traición.
Igual que yo, sus compañeros debieron mantener el secreto por alguna razón valedera, pero la mía solo fue, recuperarla y mantenerla a mi lado, para siempre.
Me acomodo la corbata que me regaló en navidad y me pongo un traje Armani completo, para lo que sucederá hoy debo estar perfecto.
Estamos en Praga, nuestra última parada antes de volver a nuestra casa y a nuestra vida en Buffalo, preparé una boda civil con unos amigos que tengo en la ciudad, ellos celebrarán la boda en su buffet y ni Darla sabe que hoy nos casaremos solo le pedí que se arregle bonita porque iremos a una reunión elegante.
Camino hasta la puerta del cuarto un poco ansioso, miro la hora, estamos a pocas horas de decir el "sí, acepto" y Darla sigue en el cuarto vistiéndose, sé que todavía no sabe nada de lo que está por suceder pero me pone mucho más ansioso que tarde tanto.
- ¡Hora de irnos, mi amor! - grito más ansioso todavía volviendo a mirar el reloj.
- ¡Sí, Pato ya voy! - escucho su melodiosa voz desde el cuarto, doy un suspiro y miro a mis niños, sentados en el sofá.
- Papá, ya estamos listos - Comenta Evangeline, sonríente acomodándose en el sillón con sus hermanos.
-La que falta es mamá - vuelvo a mirar la hora - Darla, apresúrate...
- Ya salgo, mi amor... - sale del cuarto, mientras la veo caminar hacia mi, me quedo boquiabierto, ese vestido rojo escotado, le queda tan bien, se ve tan hermosa, que necesito tomarme un momento para volver a mí centro.
He estado enamorado de esta mujer desde que tengo 14 años de edad y he esperado más de 17 años para por fin casarme con ella, ese día ha llegado, por fin me dará el "Si" será solo mía como siempre debió ser.
Salimos de la iglesia, en una hermosa lluvia de flores, directo a la limosina, ni bien nos acomodamos, Darla salta sobre mí para abrazarme y darme un beso.- ¡Mi amor! - exclamo tomándola en mis brazos- te dañaras el vestido, todavía tenemos una fiesta por delante, no te olvides de eso.- No me importa - respondo mientras me besa buscándome la lengua, es un delicioso beso de los apasionados que siempre nos gustaron - tenemos tiempo ¿No? - pregunta abriendo lo ojos muy grandes, brillan como dos luceros - podemos hacer el amor...¿No te parece? - pregunta mordiendo su labio con picardía.- Espera a la noche, gatita, con todo lo que es tu vestido no creo que podamos hacer nada.- ¿En serio? - pregunta con tono burlón, después observo con sorpresa como da vuelta la cintura del vestido y se deshace de toda la parte larga del vestido, su cola desaparece rápidame
Pensé mucho y creo que antes de dar el sí tengo un secreto que debo contarle a Darla, lo reflexioné demasiado estos días y tomé una decisión; Dekran es mi hijo y Darla lo debe saber, no sé cómo me irá cuando se lo cuente pero...es necesario, para entrar limpios al altar, sin secretos entre nosotros.Antes de irme al departamento y que mis carceleros no me dejen ir a casa, decido salir de mi despacho directamente a los suburbios.Sé que es temprano que mi madre y la madre de Darla están preocupadas por los últimos preparativos de la recepción así que puedo encontrar sola a mi esposa, espero que no haya salido.-Hola Downie - saludo dejando mi saco en la puerta ni bien entro a casa.-¿Señor? ¿Que hace acá? Sabe que su madre no desea que vea a la señora.-Me vale, ella no está ¿Verdad?-No, sol
Ahora que estamos a pocos días de nuestra boda la madre de Darla y mi madre se les ocurrió la gran idea de botarme de casa para que no esté con mi esposa hasta la noche de bodas.Es lo más absurdo que se les podía ocurrir, ¡por el amor de Dios! vivimos juntos casi dos años y me sacan de mi casa como si fuera un novio debutante para que no me acueste con ella, desde que tenemos 15 años estamos juntos y ellas me salen con esto; pero bueno, acepto sus caprichos me voy a mi departamento del centro, solo serán dos días, lograré aguantar, después no habrá más separación, por fin daremos el sí para siempre.Para que no se me ocurra volver a casa mi hermano Claude y Chris se van a mi departamento, se supone que en la noche me organizarán una despedida de soltero.- ¡Esta noche vamos a salir, bro! - exclama Claude frotándose
Fuimos al médico después del ultrasonido por fin puedo ver a mis mellizos, un niño y una niña, Darla está feliz, sé que al comienzo se asustó pero ahora la noticia y verlos hizo que ese sentimiento de miedo y de confusión ha desaparecido, ahora es todo sonrisas.Así que todo ya está yendo en el carril rápido mis hijos nacerán en un mes y medio y comenzamos con los preparativos de la boda.Darla se está dedicando a eso porque yo estoy como loco con el trabajo, el trabajo en la fiscalía es mortal, pero me doy modos de pasar tiempo con los niños y con mi esposa.Mi madre y la madre de Darla le están ayudando con los preparativos de la boda, el local, la fiesta, los invitados, invitaciones, etc, son tantas cosas que sé que Darla no lograría hacerlo todo si lo hace sola.Darla ya diseño su vestido, pero no sabe cómo
Recogeré a Darla de su clase de belly dancing, llegué muy temprano como no tengo nada más que hacer empiezo a ver lo que tiene la academia para ofrecer, reviso las clases que dan y una me llama mucho la atención "Baile salsa Cubana, con Raúl Sánchez"- ¿Disculpe? - pregunto acercándome a la recepción.- ¿Sí? - pregunta la encargada levantando la mirada.- ¿De que se trata esto del baile salsa? - vuelvo a preguntar mirando con más atención el panfleto donde explica sobre las clases.- Ahh, recién lo estamos implementando, tenemos un profesor cubano que llegó recién a la ciudad y enseña a muchachos como tu a bailar salsa.- Mi novia, está en la clase de belly dancing, pero quisiera preguntar si podemos entrar a esta clase juntos.- Claro que sí, las
Al día siguiente, no hablé mucho con Claude de lo ocurrido en el Club, al final lo que pasa en el club se queda en el club y es mejor así, no pienso escuchar la cosas sucias que mi hermano puede soltar de mi mujer, así que prefiero callar y dejar las cosas en paz, fue una experiencia única de la cual no quiero volver a hablar.Dos días después de su despedida de soltero, mi hermanito está listo para casarse mirándose al espejo vestido de frac, nunca creí ver esto hasta ahora lo veo y no lo puedo creer, pensé que Claude sería un mujeriego soltero toda la vida.Mientras estamos terminando de arreglarnos en frente del espejo de recepción del hotel donde se realizará la fiesta, Darla se acerca a nosotros con un hermoso conjuntito medio rosado, con el cabello suelto, se ve tan hermosa y espectacular como siempre aunque este casi con ocho meses de embarazo, se acerca a mi
Último capítulo