La Hija Del Diablo

¿Cuánto estarías dispuesta a perder por amor? Yo… Lo perdí absolutamente todo. Mi nombre es Adele, y acabo de divorciarme del que alguna vez consideré el amor de mi vida, por el cual abandoné todo. Ahora me veo obligada a regresar con la familia a la cual abandoné, para casarme en un matrimonio arreglado y a reparar todo el daño que había causado con mi ausencia. ¿Pero quién querría casarse con una mujer como yo? Solo había una persona, el mismo hombre que me amó desde hace más de 10 años, al cual yo rompí y abandoné cuando me casé por primera vez. Iván Coscov, mejor conocido como “el diablo”, ha regresado para vengarse de mí… Y ahora me veo obligada a pasar cada una de mis noches junto al diablo, quien alguna vez me amó, y ahora solo quiere hacerme daño.

Alexander Jones, el CEO de una gran empresa, heredero de un imperio, decide tomar venganza contra el hombre que causó la muerte de su padre y de la hija de este al creer que ella también le hizo daño a su hermana menor. Isabella una dulce chica, inocente de todo, que sufre maltrato en manos de su padre, cuando conoce a Alexander queda flechada por este atractivo y poderoso hombre sin saber las verdaderas intenciones con las que él se esta acercando a ella. Los dos comienzan un apasionado romance y Alexander empieza a enamorarse también de Isabella y piensa en dejar su venganza en el pasado, pero su hermana no esta de acuerdo con esto, ella odia demasiado a Isabella por lo que no piensa detener sus planes. Debido a un plan de la hermana de Alexander, Isabella termina por enterarse de todo, rompiéndose su corazón en ese instante, quedando destrozada por ser lastimada de esa manera tan cruel y cuando llega a su casa las cosas se complican mucho más para ella. Su padre esta furioso pensando que ella había ayudado a Alexander a destruir su empresa, por lo que decide tomar venganza contra su propia hija. ¿Este amor será capaz de sobrevivir a pesar de todo? ¿Alexander podrá salvar a Isabella?  

Céline es una fotógrafa francesa que viaja a Rumanía junto con su madre para superar un dolor amoroso, su estadía en el pueblo y su curiosidad por caminar, conocer y fotografiar el bosque la llevarán a la mirada del ser más temido y cruel que pueda existir, Loan Popescu, un Alpha misterioso que oculta bajo su aura un poder deslumbrante que los simple mortales desearían poseer, incluyendo... los de su misma especie.

Una noche ella salvó a uno de los narcotraficantes más peligrosos de Rusia de la muerte, sin saber que al hacerlo, se convertiría en su más grande obsesión y que él haría todo por hacerla suya. (...) Dasha Petrov es una joven universitaria becada que trabaja en un club nocturno de mala muerte para poder sobrevivir, un día cuando se disponía a volver a su casa a altas horas de la noche, escucha quejidos raros en un callejón oscuro y, pensando que se trataba de algún animal indefenso, se acerca y se consigue con la sorpresa que es un hombre herido de bala. Su instinto le dice que corra sin mirar atrás, pero su conciencia no le permite irse sin ayudarlo. Sin saber que al hacerlo, se convertirá en la obsesión de Alek Vólkov; un poderoso mafioso ruso.

Adriano era arrogante y nunca imaginó que necesitaría a alguien, más aún a Bianca, a quien encontraba fea y sin encanto, una pobrecita que no era más que una secretaria felpuda. Pero fue precisamente ella quien se acercó a él cuando más lo necesitaba. Bianca trabajaba para Adriano por el salario que le permitía vivir mejor de lo que estaba destinada, pero lo veía como un hombre grosero e irrespetuoso. Pero fue él quien cambió su vida de manera radical y le permitió lograr lo que había soñado. Eran dos personas diferentes con la misma necesidad. Querían ser amados.

¿De quién huyes? Él es mi Salvador, pero también es mi verdugo, mi alma gemela y más que eso. Es mi amor y yo su mortal obsesión, una que fácilmente puede llevarnos al precipicio, al mar escarlata que son sus ojos. Mi perdición lleva su nombre y su manía lleva el mío marcado en su piel: eso me convierte en la obsesión de Kylian Everingham, el rey de los vampiros. Ambos somos la perdición del otro. ¿Acaso es fácil evadir un dulce y amargo peligro?

Un cuerpo fornido y mucho más grande que el de Clara la chocó de lleno, haciéndola tropezar, especialmente porque los tacos aguja plateados que su jefe le había dado no ayudaban mucho. Ambos cayeron al suelo, ella de espaldas al frío y sucio piso, y el misterioso sujeto encima de ella, con cada brazo a los costados de su rostro, sosteniéndose para no aplastar con todo su peso a la joven que había salido de la nada y le había arruinado su huida. Todo pasó muy rápido, Clara abrió grandes sus ojos color miel al ver que su nariz respingada y pequeña rozaba muy de cerca la nariz recta del hombre que tenía delante. Clara no recordaba la última vez que había estado tan cerca de un hombre. En realidad, nunca lo había estado. Quiso protestar, pero el hombre fue más rápido y le ordenó, con una voz ronca pero sensual: -Ayúdame a esconderme.-

Me encontraba en el hospital, después de que me colgaran 99 llamadas a mis dos hermanos. Finalmente llegaron, acompañados de mi hermana biológica que habían encontrado. Mi hermano mayor, el que me había rescatado de mis padres abusivos, levantó la mano y me dio una bofetada. — ¡Cynthia, para pelear por el cariño de Sarah, ¿te atreviste a fingir que tenías una enfermedad terminal? ¿Y venir a este lugar para asustarnos? Me cubrí la cara, que estaba roja e inflamada, mientras escuchaba al segundo hermano, que siempre había confiado en mí, reír abrazado a Sarah. — ¿Acaso pensaste que, como Sarah no se sentía bien, fingirías una enfermedad para llamar nuestra atención? — Ya basta, siempre viviste con todo lo que querías, has estado bien de salud todo este tiempo, ¿cómo vas a estar enferma? Sarah, muy comprensiva, intervino: — Hermanos, no la regañen. Creo que solo está así porque piensa que yo le quité su lugar, por eso actúa de esta manera... Miré a mis dos hermanos, que me habían consentido durante diez años, y de repente, sentí que todo lo demás ya no importaba. Después de todo, solo me quedaban siete días de vida. En siete días, todo volvería a la normalidad después de mi partida. Pero ellos no podían aceptarlo.

Hazel Sallow creyó haberse sacado la lotería tras haber robado a un millonario por diversión, su único error, fue tomar un reloj que, para Zarek Galani, representaba un enorme valor sentimental, él, la encontraría para recuperar lo que le pertenecía, ella sin opciones, lo devolvería, el único asunto es que Galani no iba a quedarse de brazos cruzados, aun ella le continuaría debiendo y usaría eso a su favor para tenerla bajo su poder.

Ariel es simpleza y sutileza. Viviendo la blasfemia y la miseria bajo el mismo techo con una mujer frívola y perversa, su madre. Se ve en la obligación de arrojarse a los brazos del terco y enigmático, Máximo Kahler. Máximo es impredecible, reservado y con una cuantiosa fortuna a la mano. Viviendo bajo la sombra de un tortuoso pasado y un presente poco afortunado, se verá en la penuria de ofrecer una pequeña y jugosa cantidad de dinero por Ariel, sin embargo, él no actúa como si hubiese comprado a una mujer ¿entonces que busca? Es la misma pregunta que se hace Ariel una vez que se convierte bajo su cuidado, en la aprendiz del millonario. "El amor era una decisión y no estaba en venta" —¿Que llevas puesto hoy debajo de la ropa? —He comprado lenceria nueva, ¿es el negro tu color favorito? —No lo sé, tendría que vértelo puesto para confirmarlo. *Enviar foto*