Filtrar por
Actualizando estado
TodosEn procesoCompleto
Clasificar por
TodosPopularidadRecomendaciónEvaluaciónÚltima actualización
El Precio

El Precio

Mi hijo, en sus últimos momentos, cuando ya casi no tenía fuerzas, me dijo con la voz quebrada: —Mamá, quiero ir con papá a ver el circo Barnum & Bailey. Pero, por más que intenté, nunca pude contactar a mi marido. Y así, sin poder hacer nada al respecto, tuve que ver cómo mi hijo se iba con aquel deseo en el corazón. Días después, mi marido, que había estado incomunicado todo ese tiempo, apareció de repente de la nada... ¡junto a mi prima! Se abrazaron con cariño y se besaron apasionados, con descaro, delante de mí. Fue entonces cuando descubrí que, mientras mi hijo agonizaba por su maldita enfermedad, ellos se veían muy campantes a escondidas en el Valle Rosado. El corazón se me hizo mil pedazos. Decidí que me iría y que lo dejaría todo. Pero mi marido, ese mismo que tanto me menospreció, de repente rompió en llanto.
Cuento corto · Hombres Lobo
1.5K leídosCompleted
Leer
Añadido
Embarazada de mi mejor amigo Gay!

Embarazada de mi mejor amigo Gay!

Todos tenemos un amor platónico. Fanny no fue la excepción a ello. El problema es que Alan, el chico más popular tiene una regla, o más bien, una ley; Cero Vírgenes. No las mira ni las toca. Para su mala suerte Estefanía es virgen. Desesperada por salir con él. Le pide a su mejor amigo Gay, que le quite la virginidad. Unas copas de vino y una mala decisión traerán una bendición. Deberán afrontar las consecuencias de sus actos. La aparición de un chico nuevo en el instituto, desafiará las reglas de la vida. Mismas que el destino está dispuesto a romper. Todos se preguntan antes de leer, ¿Es Gay? Mejor ven, vamos a descubrirlo.
Romance
9.814.4K leídosOngoing
Leer
Añadido
Seducida por el mafioso

Seducida por el mafioso

Catherine Shay vive una difícil vida, aun teniendo tres trabajos no le alcanza para pagar el tratamiento de la enfermedad de su madre, desesperada, la única solución que se le presenta es trabajar como prepago. Jessica es conocida en la ciudad como la proxeneta más cotizada en Nueva York, pues posee las mejores mujeres del mercado. Marcus D'monte, un famoso narcotraficante va a cumplir años y sus amigos se encargarán de rentarle una hermosa prepago, es ahí donde conocerá a Catherine, la linda y sexy chica por quien le nacerá una inexplicable adicción.
Romance
8.713.8K leídosCompleted
Leer
Añadido
¡No quiero ser madrastra!

¡No quiero ser madrastra!

Mi novio es el mejor cazador de la manada Luna Plena. Tres años atrás, antes de irse a esa misión secreta de Nivel S, me dijo: —Cuando regrese, haremos la ceremonia de marcado. Me aferré con devoción a esa promesa mil días y mil noches… hasta que, hace diez días, por fin, volvió. Sin embargo, mientras preparaba la ceremonia, escuché por casualidad su conversación con su compañero. —¿Va a marcar a Elena? Entonces, ¿qué será de Dolores y Esteban? El niño tiene más de dos años y es su copia exacta —dijo el hombre, antes de añadir—: Si Elena descubre que durante todos estos años usted fingió una misión secreta para ver nacer a Esteban y criarlo… —Ella jamás debe saberlo. —Octavio lanzó una mirada decidida a su subalterno—. —Que Dolores controle su lengua y al niño. Mi única compañera de alma será Elena. ¿Dolores? ¿Niño? Mientras yo rezaba día y noche por su vida, él estaba criando un hijo con otra… Furiosa, apreté los puños hasta clavarme las uñas en las palmas y, al encerrarme en mi cuarto, llamé a mi padre: —Papá… quiero volver a casa.
Cuento corto · Hombres Lobo
1.2K leídosCompleted
Leer
Añadido
Luna Envenenada: La Ira de la Loba

Luna Envenenada: La Ira de la Loba

Mi padre es el Beta de la manada, y en nuestra familia siempre ha existido la tradición de establecer alianzas matrimoniales con el Rey Alfa. Un día antes del compromiso, arriesgué mi vida para salvar a mi hermanastra Isabella Ramos, entrando sola al territorio de los lobos solitarios: el Nido Salvaje. Al día siguiente, durante la ceremonia del vínculo de apareamiento, proyectaron frente a todos un video en el que era humillada por los hombres lobo errantes. El Rey Alfa, furioso, se negó a marcarme e Isabella tomó mi lugar como Reina Luna. Para los demás me convertí en una cualquiera. Gritaban que debía ser exiliada y entregada noche tras noche a los hombres lobo errantes, olvidando que todo había sucedido porque intenté proteger a la manada… y castigándome por ello. En mi momento más oscuro, el hermano menor del Rey Alfa, Damián Silva, me ofreció su corazón. —Sofía Delgado, siempre te he amado en silencio. En nombre de la Luna, quiero ser tu compañero eterno. Acepté, profundamente conmovida. Un año después de casarnos, el médico de la manada me dio una noticia: podía quedar embarazada de un cachorro. Corrí emocionada a buscar a Damián, pero, por accidente, escuché una conversación que me rompió el alma. —Damián, fuimos nosotros quienes ayudamos a los hombres lobo errantes a infiltrarse en la manada. También usamos a Isabella para atraer a Sofía al Nido Salvaje. ¿No crees que nos pasamos? Mira cómo confía en ti ahora... Damián suspiró con pesar. —Era la única forma de que Isabella se casara con mi hermano. Sofía... tenía que ser la sacrificada. Pagaré su dolor con el resto de mi vida.
Cuento corto · Hombres Lobo
1.6K leídosCompleted
Leer
Añadido
Después de la Muerte de Mi Hijo, Renuncié al Título de Luna

Después de la Muerte de Mi Hijo, Renuncié al Título de Luna

Bajo la luz fría de la luna llena, mi compañero, el Alfa Esteban, no se presentó al ensayo de la ceremonia de mayoría de edad de nuestro hijo. ¿La razón? Su amante Omega, Sofía, estaba en celo. Pero en durante la verdadera ceremonia, nuestro hijo César fue emboscado por una manada rival. Cuando escuché la noticia, César había recibido un disparo. Estaba muerto, tendido en un charco de su propia sangre. Me desplomé junto a él, hecha pedazos, como si mi alma se hubiera roto en mil trozos, cuando la voz de Esteban, fingiendo una disculpa, llegó a través del enlace mental. —Lo siento, Sofía me necesita. Estoy seguro de que César puede encargarse de las cosas. Solo asegúrate de que César descanse temprano, no dejes que corra y arruine la celebración de mañana. Miré el cuerpo destrozado de mi hijo, mi voz temblaba, —Ya no correrá a ninguna parte. —Bien —dijo Esteban, sonando complacido—. El linaje de Sofía es más puro. Ella está mejor capacitada para dar a la Manada Piedra herederos fuertes. Deberías entenderlo. Corté el enlace. Después de entregar el cuerpo de mi hijo a las llamas, encontré el ritual secreto para romper un vínculo de pareja y contacté a un lobo con el que no hablaba en mucho, mucho tiempo. —Las protecciones territoriales de la Manada Piedra están caídas. Ya no hay barreras. Haz lo que viniste a hacer.
Cuento corto · Hombres Lobo
2.3K leídosCompleted
Leer
Añadido
Los míos se fueron saltando

Los míos se fueron saltando

El día que le propuse el divorcio, Henry Novak no pudo esperar para poder firmar el papel de la separación conmigo. Hace cinco años, yo lo había disque obligado a casarse conmigo. Ahora, por fin, ya era libre. Pero el día que oficialmente nos divorciamos, Henry llegó acompañado de Ramona Girard, "su lucecita", como bien solía llamarla. Pero expresión reflejaba una mezcla de alegría hacia ella y burla hacia mí. —Nola Savic, hasta alguien como tú puede tener un día tan patético como este. Lo observe desaparecer de mi vista. ¿Patético? Nunca más me rebajaría.
Cuento corto · Romance
2.1K leídosCompleted
Leer
Añadido
La alegría que escondí en silencio

La alegría que escondí en silencio

El escándalo más sonado del año en la Universidad de Ríoalto estalló de golpe, sin advertencia alguna: ¡un video íntimo de Elsa circulaba por el grupo general del campus! Grabado en la suite presidencial de un hotel de lujo, el clip la mostraba completamente expuesta, atada de manos a los brazos de un hombre mucho mayor que ella, con la espalda contra un enorme ventanal y una atmósfera cargada de sonidos inconfundibles que no dejaban lugar a dudas.
Cuento corto · Romance
1.7K leídosCompleted
Leer
Añadido
Tres días para morir: La mujer que aprendió a ceder

Tres días para morir: La mujer que aprendió a ceder

El médico fue claro: sin el tratamiento experimental más avanzado, solo me quedarían setenta y dos horas de vida. Pero mi esposo, Carlos Duque, entregó a Viviana Mendoza la única plaza disponible para el tratamiento. —Su insuficiencia renal está muy avanzada. —Me explicó. Asentí y me tragué esas pastillas que solo acelerarían mi muerte. En el tiempo que me restaba, hice muchas cosas. Durante la firma, el abogado no podía controlar el temblor de sus manos. —Doscientos millones de dólares en acciones... ¿está segura de que quiere transferir todo? —Sí, todo para Viviana Mendoza —confirmé. Mi hija, Camila, reía dichosa en los brazos de ella. —¡Mami Viviana me compró un vestido precioso! —Te queda hermoso, cariño. Ahora tienes que hacerme caso solo a mí —le dijo. Esa galería que había construido con mis esfuerzos lucía el nombre de Viviana en la entrada. —Mariana, tienes un corazón de oro —me decía entre lágrimas. —Sé que la vas a manejar mucho mejor que yo —le respondí. Hasta, incluso, renuncié al fondo fiduciario de mis padres firmando los papeles. Carlos mostró una sonrisa genuina que no le había visto en años. —Has cambiado tanto. Ya no eres tan confrontativa. Te ves bella así. Exacto, ya en mi lecho de muerte me había convertido en la «Mariana perfecta» que ellos siempre quisieron: la Mariana, obediente, desprendida, que ya no peleaba por nada. Igual, la cuenta regresiva de setenta y dos horas estaba en marcha. Me daba curiosidad saber qué iban a recordar de mí cuando mi corazón dejara de latir. ¿A esa esposa ejemplar que «aprendió a ceder», o a una mujer que utilizó su muerte para ejecutar su venganza maestra?
Cuento corto · Romance
3.4K leídosCompleted
Leer
Añadido
Seis Años de Noviazgo y Un Adiós

Seis Años de Noviazgo y Un Adiós

Iba a casarme, pero no con Soren, mi novio de seis años. Como el líder de la mafia más poderoso , Soren estaba metido hasta el cuello en “asuntos de trabajo” con su nueva mano derecha, Thea; tan metido que se olvidó de mí… y de nuestra promesa: casarnos en nuestro sexto aniversario. En la fiesta de Navidad pidió el pastel de nuez que le encanta a Thea y olvidó que soy alérgica. Entre las bromas de los amigos, una rebanada me pegó de lleno en la cara y me desmayé por la reacción alérgica. Cuando desperté, le dije a mi madre:—No me caso con Soren. Me voy a casa.
Cuento corto · Mafia
1.6K leídosCompleted
Leer
Añadido
Anterior
1
...
1415161718
...
35
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP