Alexandra una joven de 22 años, que tiene que lidiar sola con los problemas económicos y familiares, busca desesperadamente una solución que le ayude a salir de sus problemas.Edward, un joven apuesto y adinerado, dueño de una de las empresas mas prestigiosas de Nueva York, sin previo aviso se topa con un gran problema, al enterarse que gracias a una clausula podría perder todo aquello por lo que ha trabajado.Así que en su desesperada búsqueda de una pronta solución y aprovechándose de la desesperación de Alexandra, le ofrece un trato.Ellos dos serán el complemento uno de el otro.Y tu, ¿Qué serias capaz de hacer por dinero?
Leer másAbro los ojos lentamente, la luz me impide abrirlos del todo, trato de ponerme de pie pero el dolor me lo impide, cada espacio en mi piel me arde.
Observó a mi alrededor y me doy cuenta que una vez más estoy desnuda y tirada en el piso frio de mi habitación, como puedo me logro poner de pie, me paro frente a aquel enorme espejo quebrado y las lagrima comienzan a salir de mis ojos.
Analizo horrorizada mi cuerpo desnudo en aquel espejo, puedo ver los enormes moretones en mis piernas y brazos, la sangre que escurre de entre mis piernas.
Camino dolorosamente hasta mi baño, pongo seguro y abro la llave del agua caliente, entro cuidadosamente a la ducha y sin hacer nada solo me paro ahí, puedo ver como el agua cambia de transparente a un rojo vivo en cuanto toca mi piel, acaricio mi cuerpo con cautela, tratando de no lastimarme aún mas, para ayudar a que las manchas desaparezcan de mi cuerpo.
Una vez limpia salgo del baño, busco la ropa más holgada que encuentro y me visto cuidadosamente, tomo un poco de maquillaje y trato de cubrir los moretones en mi rostro lo más que puedo.
Una vez que me siento lista tomo un par de libros para salir de mi habitación y ahí está el, sentado en el comedor comiendo tranquilamente, como si nada de esto hubiese pasado.
Doy los pasos firmes y rápidos para salir pronto de ahí pero justo cuando llego hasta la puerta su voz retumba en la habitación.
— ¿A dónde vas hija? — pregunta el con su ya conocida y asquerosa voz.
Inconscientemente siento como todos los músculos de mi cuerpo se tensan.
Ignoro su pregunta, abro la puerta e intento salir de la casa, pero siento un fuerte tirón en mi cabello que me obliga a voltear de inmediato y veo como es mi mama quien me ha jalado.
—Tu papá te acaba de hacer una pregunta, ¿porque no le respondes? — me pregunta sin soltarme del cabello
—Lo siento mamá no lo escuché— digo mientras arqueo mi espalda para evitar que me siga haciendo daño
— A parte de estúpida eres sorda— dice soltándome molesta, provocando que tire mis libros al piso.
Me pongo de rodillas para recogerlos esperando que no se hayan dañado
—Otra vez gastando el dinero en esas estupideces— dice mientras se sienta junto a Adán en el comedor.
—Son para Daniel, necesita…—
— ¡Sabes que no quiero saber nada de ese bastardo! — me dice molesta.
—Sí, perdón— le digo agachada
Ella no dice nada más así que entiendo que es mi señal para salir.
Llego hasta la habitación número 13, abro las puertas cuidadosamente y en cuanto su mirada se cruza con la mía grita de la emoción.
— ¡Alex! — dice alzando sus manos y yo me lanzo para abrazarlo y a darle un beso.
— ¿Cómo estás Enano?- Le pregunto mientras le revuelvo el cabello.
—Bien, hoy vino la señorita rose a buscarte, estuvo conmigo un momento jugando, pero después se fue, me dijo que te dijera que en cuanto llegaras fueras a su oficina— me dice jugueteando con mis manos
—Bueno, pues entonces voy a ver qué quiere, ahora regreso— le digo mientras acomodo los libros en su escritorio, me regreso a darle un beso en la frente para ir a buscar a rose.
Una vez frente a su oficina le tocó la puerta y desde adentro alguien grita "Adelante", así que abro la puerta y entro.
—Buenos días rose— le digo entrando a la oficina
— Buenos días Alexandra, toma asiento por favor— me dice mientras me señala un asiento frente a ella.
Yo hago lo que me dice y entro lentamente a la oficina y me siento en una silla frente a ella, entonces noto como comienza a verme deteniamente.
— ¿te pasa algo? — pregunta mirándome cuidadosamente y yo niego.
—No nada, es solo que me torcí el tobillo de camino para acá— le digo y ella asiente, estoy muy segura que no me ha creído nada, pero como siempre, evita seguir preguntándome.
—lamentó tener que llamarte, sé que las cosas siguen sin ir muy bien para ti, pero…—toma una pausa mientras nerviosamente mira el bolígrafo en sus manos— sabes que debes mucho, y si no liquidas tu cuenta a más tardar antes que termine este mes ya no podemos continuar dando tratamiento a tu hermano, y será trasladado a un hospital del gobierno—
En ese momento siento como si me callera un balde de agua helada en la espalda
—Usted sabe que no tengo dinero en este momento, con lo que me pagan en el café, apenas si puedo solventar los gastos de sus medicinas, no tengo nada mas y mi mamá... bueno usted sabe que mi mamá no me apoya en lo absoluto— digo al borde de las lágrimas
Ella se inclina y toma mis manos y me da una pequeña sonrisa.
— Lo sé, pero ya no puedo hacer más por ti, si por mi fuera le daría Daniel la atención gratuita, pero sabes que no puedo, ya hice todo lo que está en mis manos, pero ya no puedo hacer más—
Me dice y siento como todo mi mundo se desborda ¿Ahora qué voy hacer?
Solo pensar en que Daniel ira una vez más a un hospital de gobierno, y pensar como le fue l última vez que estuvo ahí, me muero de miedo.
—Pero tranquila, no todo está perdido, hable con mi hermano ayer sobre ti — me dice, entonces yo presto toda mi atención a ella, veo que saca de su cartera una tarjeta negra, con letras doradas escritas en ella— frente a la oficina donde el trabaja están solicitando una secretaría, según me conto están desesperados, porque la secretaria actual esta de salida y les urge encontrar una nueva, asi qur mañana mismo comenzaran con las entrevistas— dice entregándome la tarjeta
—el conoce muy bien a la secretaria que esta por irse, y cobrara un favor que le debe, dándote la oportunidad de otorgarte el primer turno para la entrevista de trabajo con el señor Müller— dice emocionada
Yo observo alegre la tarjeta frente a mí, pero entonces caigo en mi cruda realidad.
—Agradezco tanto esto, pero no lo puedo aceptar—le digo, mientras ella me mira confundida.
— ¿Cómo que no puedes aceptarla? —
— ¿Ya me viste?, no tengo nada decente para una entrevista de trabajo, mi mejor ropa es esta— digo mientras me pongo de pie frente a ella, con mis Jeans desgastados y mis tenis descoloridos.
— Lo se Alex — dice y se agacha para sacar una bolsa de su escritorio y ponerla frente a mí— por eso te he comprado esto—
Yo me inclino y mis ojos se abren de sorpresa, al ver como la bolsa está llena de ropa, y algunos zapatos y accesorios.
—No Rose, esto es mucho— me quejo pero ella se para y se pone frente a mí.
—Mira niña, si quieres lo puedes ver como un préstamo, pero tómalos, necesitas en empleo—trato de negarme una vez mas pero ella me interrumpe— hazlo por tu hermano, recuerda que esta es la única solución—
Me dice mirándome fijamente y yo entiendo que es verdad, necesito el trabajo.
— ¿y si no me contratan?
— Querida, confía en mí, que estoy segura que así será.
—Gracias— le digo mientras me arrojo a sus brazos.
Mientras ella me recibe en un cálido abrazo.
—Por nada niña, ahora anda ve con tu hermanito— Me dice y yo asiento, tomo la bolsas y salgo de la oficina.
Llego hasta su habitación y me doy cuenta que está dormido, así que cuidadosamente me acomodo a un lado de él y le acaricio la l cabello.
No puedo evitar tener miedo, no sé qué hacer para ayudar a mi hermano, necesito el trabajo, ahora más que nunca, no puedo solventar los gastos completos del hospital, solo de trabajar en el café.
Además que no puedo permitir que lo lleven a un hospital público, solo de pensar que la última vez que estuvo en un hospital público, casi muere de una infección.
Mi hermano tiene apenas 5 años, está enfermo del corazón, hace 8 meses que esta interno, y está en espera de recibir un trasplante.
Yo tengo 22 años, soy su única hermana y el único familiar con quien puede contar, nuestro papá falleció hace 4 años, y en cuanto a mi mamá, pues, mi mamá es una drogadicta que vive con su pareja, ella y mi papá se separaron justo después de que mi hermano naciera.
La pareja de mi mamá es un drogadicto, alcohólico y enfermo, él es quien abusa de mí casi cada noche, desde que tengo 19.
Tantas veces he querido huir de ahí, pero no puedo, no tengo el valor de abandonar mi hermano, además que viviendo con ellos, evito pagar renta, y así puedo solventar los gastos de Daniel.
— Todo va a estar bien enano— le digo mientras acaricio su cabello.
POV Alexandra.2 Años después.Estoy lavando mis manos, tratando de quitar la pintura de mis manos, Elizabeth me lleno de pintura por todos lados.Desde que la pongo a hacer "manualidades", esperando que gaste energía, está cada se ha vuelto un caos total, y no ha servido de mucho, pues la energía jamás se le termina.Entonces siento como Edward me abraza por detrás recargando su cabeza en mi hombro.Y comienza a besarme el cuello, mientras me interrumpe por completo y me hace inconscientemente cerrar los ojos.—Llevemos a los niños a la cama, necesito un segundo a solas contigo.Me dice sin dejar de besarme, y yo sonrío ante su tacto.Me doy la vuelta y paso mis manos por su nuca mientras él me toma por la cintura.—Necesitamos llevarlos a la cama, pero para que duerman porque mañana será un largo día.
POV Edward.—Luces guapísimo.Dice Michelle viéndome desde la puerta de mi habitación, con esa cara de orgullo y yo sonrío feliz.Entonces ella corre y me da un abrazo.—Pero mírate tú, estás hermosa.Le digo dándole una vuelta.—Muero por ver a Alexandra, seguro se va a ver fantástica.Dice Michelle emocionada.—Yo también.Le digo sonriendo.—Hijo, es hora de irnos.Dice papá desde la puerta y yo asiento.Extiendo mi brazo a Michelle y ella lo toma, salimos de la habitación y bajamos las escaleras.Abajo ya me espera mamá y papá.—Vámonos.Les digo y comenzamos a salir de la casa.Entro al auto, donde Julián ya me espera.Junto conmigo entran mi mamá, mi papá y Michelle, en cuanto estamos adentro, Juli&aa
POV Alexandra.—Señora por favor, necesitamos que puje un poco más.Escucho como el médico me dice, pero a este punto siento como el alma está a punto de abandonar mi cuerpo.Respiro profundamente tratando de controlarme pero es casi imposible.—Amor, solo un poco más, ya casi lo has logradoEscucho que Edward me dice en el oído, así que yo aprieto su mano y busco fuerzas desde el último rincón de mi cuerpo.—Solo una última vez, ya casi lo logra.Dice el médico así que yo pujo con todas mis fuerzas.—HAAAAAAAAGrito de dolor mientras siento como por fin logra salir, siento un enorme vacío en mi interior, así que caigo exhausta sobre la almohada.Pero Edward en ningún momento deja de apretar mi mano, aún con los ojos cerrados escucho un sonoro llanto de bebé.—
POV Edward.Llego hasta su habitación, mis manos tiemblan de miedo y ansiedad, abro cuidadosamente la puerta, y entro tratando de no hacer ruido.Me paro helado en cuanto la veo ahí tirada en completa serenidad mientras mi corazón palpita más fuerte.Me acerco hasta estar junto a ella, una lágrima corre de mi rostro al verla finalmente aquí frente a mí, tomo su mano y depósito un corto beso en ella.Pongo mi mano en su vientre tratando de entender que en verdad está aquí, y que está bien.Me quito los zapatos y subo con ella a la cama, tomo su mano con la mía y tras unos minutos ella abre los ojos y voltea a verme, en cuanto mi mirada se cruza con la suya me giro para abrazarla más fuerte y ella comienza a llorar.Yo me quedo ahí abrazándola mientras ella llora desconsolada en mi pecho.Acaricio su espalda tratando de reconfo
P.V Iván.Estacionó el auto y bajo con una enorme sonrisa de mi rostro, me doy la vuelta y le abro la puerta a Abigail, quien toma mi mano mostrando esa enorme y bella sonrisa—GraciasMe dice mientras yo la tomo de la mano y sin soltarla comienzo a caminar en dirección a la casa, pero antes de entrar me detengo y le doy un corto beso en sus labios.A lo que ella solo me da una divertida sonrisa.Entramos a la casa y en cuanto entramos Michelle corre hasta nosotros, y de inmediato Abigail suelta mi mano.—Hasta que lleganNos dice Michelle mirándonos con los brazos cruzados,—Lo siento, por la lluvia no podíamos regresar antes.Le digo pero ella nos ve con esa mirada incrédula, como si sospechara algo de lo qué pasó ahí afuera.—Como sea, pero es mejor que corran para que celebren con nosotrosDice y prácticamente
POV Edward.Abro los ojos, y lo primero que veo es a Alexandra recostada junto a mí, de inmediato una sonrisa escapa de mi rostro.Alexandra está plácidamente dormida junto a mí, se ve tan tierna.Veo el reloj y veo que apenas son las 7, una parte de mi quiere ir a correr, pero la otra parte no se quiere alejar de ella, y está ocasión gana la parte que no se quiere mover de aquí.Me acomodo en mi brazo de tal manera que quedo viéndola muy cerca.Paso mi mano por su rostro quitando un mechón de su rostro.Es tan hermosa.Aunque pasó tanto tiempo, y pasaron tantas cosas, ella sigue siendo la misma mujer de quien me enamore.Pongo mi mano en su vientre y comienzo a acariciarlo lentamente.Entonces ellas e remueve y abre los ojos.—lo siento, no quería despertarte—No he preocupesMe dice mirándome fijamente.<
Último capítulo