Capítulo cincuenta y seis. ¡¡¡Dos!!!
Natasha hizo un esfuerzo considerable para no reírse de las cosas que Michael hacía cuando se trataba de Bruno, pero fracasó.
—¿Creíste que esas rosas eran para mí? —preguntó arrastrándolo a la salida del aeropuerto con Emma y Ryan caminando detrás de ellos.
—¿Qué puedo decir en mi defensa? —respondió con otra pregunta—. ¿Sabes desde cuando ese par se entienden? —añadió y Natasha negó.
—No tengo ni la más mínima idea. Lo que considero importante es que no soy el objetivo de Bruno y no sabes cuánto me alegra. Hemos sido amigos por muchos años, siendo sincera no me habría gustado que termináramos mal.
Michael asintió y le sonrió antes de darle un corto beso.
—¿Nos vamos a casa? —preguntó ya estando en el auto.
—Me gustaría ir contigo, pero si no es mucha molestia prefiero quedarme en mi departamento y buscarte mañana para tomar el caso de… —Ryan hizo una pausa para no mencionar el tema del secuestro—. Estoy cansado, el viaje ha sido cómodo, pero demasiado largo —añadió y los adultos com