Asher se acercó a Evelyn, su rostro lleno de dolor y decepción.
-¿Cómo pudiste mentirme, Evelyn?-preguntó, su voz llena de emoción- ¿Cómo pudiste decirme que te sentías mal y que te quedabas en casa, cuando en realidad estabas con él?
-Asher, lo siento -dijo-No quería lastimarte.
Asher se rió, una risa amarga.
-No querías lastimarme?-repitió- Pero me has lastimado más que nadie en mi vida.
Evelyn se sintió culpable.
-Asher, no fue mi intención -dijo.
Asher se acercó más, su voz baja y emotiva.
-¿Cómo puedo confiar en ti si eres capaz de mentirme? -preguntó- ¿Cómo puedo saber que me amas de verdad?
Evelyn se sintió atrapada.
-Asher, te amo -dijo-Pero no puedo seguir así. No puedo seguir con esta relación que nos está destruyendo.
Asher se enfureció.
-¿No puedes seguir? -gritó-¿No puedes seguir conmigo? ¿Después de todo lo que he hecho por ti?
Evelyn se sintió abrumada.
-Asher, por favor -dijo-No digas eso.
-No, no -dijo-Tú siempre has sido la que ha tenido