Los labios de Tatum tiemblan, incapaz de pronunciar palabra mientras ambos se miran fijamente. Los ojos de Leila llenos de dolor y rabia, los ojos de Tatum llenos de dolor y arrepentimiento.
"La culpa de mi elección ha sido mi acompañante durante mucho tiempo y creo que lo será durante el resto de mi vida, no merezco tu perdón, lo sé, pero entonces no había nada que pudiera hacer, no sabía cómo eludir la ley".
La rabia hierve en el interior de Leila.
Incluso ahora no ve nada malo en sus acciones, escudándose en la ley, manipulándola y utilizándola para su cruel fin.
¿Siempre ha sido tan vil? ¿Qué clase de monstruo cruel intenta matar a su propio hijo inocente y lo califica de justicia?
No volverá a acercarse a Amara, jamás.
"Maldito seas tú y maldita sea tu puta ley", escupe con veneno. "Quiero ver cómo proteges a Carmela con ella cuando venga a por ella, porque voy a golpearla muy fuerte, voy a pelar lentamente cada capa de engaño que ha envuelto en tus ojos y en los de los miem