POV DE TRAVIS

Es una visión horrible; capaz de darle pesadillas por semanas a cualquier persona de mente débil. Aunque ya no es ese "animal" al que casi atropello en un camino oscuro, sino una persona bien atendida e inconsciente en una cama de hospital, esa imagen de aquella noche seguirá grabada para siempre en mi memoria.

Es un recuerdo tan vívido como las advertencias que mi GPS me dio mientras conducía por ese camino aquella noche. Salí corriendo del auto en cuanto cayó al suelo, pero casi caigo junto a ella cuando la vi. Estaba sangrando por todas partes, toda la piel de su cuerpo roja por moretones que sabía que dejarían cicatrices terribles.

Su rostro estaba hinchado, las mejillas rojas y los labios reventados, como si hubiera recibido más golpes de los que uno puede imaginar. Pero nada era tan grotesco como los dos dedos que le faltaban en su mano derecha. Ese fue el momento exacto en que entré en pánico y corrí de vuelta a mi auto. Pero no podía dejarla allí. Solo logré aleja