Capítulo 62. Llamada Desconocida
El calendario del teléfono de Ramiro marcaba el octavo día desde el incendio. Una semana y un día, y Aura Vidal seguía atrapada en un estado que no era la muerte, pero tampoco la vida consciente. No la habían inducido al coma, pero la severidad del daño pulmonar y la carga de los medicamentos la mantenían sumida en una inconsciencia profunda. Para Ramiro, era el peor tipo de limbo: un espectro de su amor al que solo se podía acceder a través de una pared de cristal y el murmullo de las máquinas.
Ramiro arribó al Argus. Con un movimiento experimentado, deslizó su vehículo hasta detenerlo frente a la entrada principal. Apenas puso un pie fuera del auto, el motor aún murmurando en la quietud, su teléfono vibró con insistencia.
Una llamada entrante.
Ramiro extrajo el dispositivo de su bolsillo. La pantalla, iluminada, mostraba un número desconocido. El simple hecho disparó una alarma silenciosa en su mente. Por un instante congelado, una certeza helada lo recorrió: pensó que eran ellos, l