En horas más tarde.
Óscar y Samantha llegaron al hospital, para llevarle comida y un cambio de ropa a Gaby, la joven se encontraba acariciando su cabecita, para ayudarlo a dormir, ya que se encontraba inquieto, debido a que había tenido un fuerte dolor de cabeza, por la fiebre.
Giró su rostro hacia su familia y sonrió sin mucho ánimo, cuando su vista se fijó en su hermano sus ojos se abrieron de par en par al verlo golpeado, entonces se acercó a ellos, aprovechando que Angelito ya no se movió.
—¿Qué te ocurrió? —indagó bajito.
Samantha la cogió por las manos y la guio hasta la sala de la habitación para que tomaran asiento y pudieran charlar, luego de que