A MERCED DEL DINERO. C166: Empezar de verdad.
Lucas desvió la vista con rapidez, como si al mirar directamente a los ojos de su padre pudiera revelar algo que no estaba listo para confesar.
—Bueno… eso es asunto de Richard, papá.
Su padre lo observó en silencio unos segundos, con esa mirada que solo un padre puede tener cuando empieza a atar cabos, cuando nota que su hijo quiere cerrar la puerta justo antes de que la conversación tome rumbo hacia la verdad.
—¿Pasó algo con Richard? —preguntó con suavidad, pero con la firmeza de quien no se deja engañar por medias respuestas.
Lucas frunció el ceño, como si intentara hacerse el confundido, pero su expresión lo delataba.
—¿Por qué preguntas eso?
—Porque ya no se hablan —respondió su padre—. He notado que están distantes. Tú apenas lo mencionas. No sé qué ocurrió, pero algo cambió. Yo esperaba que tú fueras quien hablara con él. Pensé que podrías averiguar lo que pasó, tal vez él te confiaría quién lo golpeó. Pero ahora noto que ha sucedido algo entre ustedes.
Lucas se encogió de ho