Capítulo 84 No me dejes sola
Eleonor solo se inclinó y abrazó a Jennifer con fuerza, no le dijo nada, solo la abrazó. Algo en su corazón y en su mente le decía que lo que necesitaba esa pequeña muchachita era un abrazo fuerte. Luca se acercó a ellas.
—Jennifer… —murmuró, su voz suave.
La niña no respondió, aún abrazada a Eleonor, su llanto era real y conmovedor, lloraba sorbiendo los mocos de la nariz. Ese llanto parecía venir desde adentro de su alma. A Eleonor se le humedecieron los ojos, comenzó a llorar también abrazada a la niña dándole palmaditas con ternura en la espalda. Compartió el dolor de la pequeña niña, entendiendo que eso era todo lo que ella necesitaba en este momento. El abrazo duro varios minutos que parecieron horas.
Luca se arrodilló junto a ellas. La furia gélida que lo había consumido se estaba derritiendo, reemplazada por una vulnerabilidad que rara vez mostraba. La conexión que vio entre su hija y Eleonor era innegable. Sintió de pronto una mayor tranquilidad.