—Zoey —dijo Tobías—, en el futuro deja que tu madre se encargue de estas cosas. No retrases tu trabajo. Rubí también es miembro de la familia, así que ordena a los sirvientes que la atiendan.
Luego presentó a Rubí a los sirvientes: —Esta es la segunda hija, señorita Rubí. A partir de hoy vivirá aquí. ¿Lo entienden?
Fue una afirmación de la identidad de Rubí ante todos los sirvientes, para que tuvieran que mostrarle respeto. Cuando Tobías lo dijo en persona, los sirvientes de la familia York se miraron entre sí con expresiones graves, como transmitiéndose un mensaje. También parecían captar el significado de Tobías.
Sin embargo, ¿por qué había aparecido de repente una segunda hija? Todos estaban desconcertados, pero nadie se atrevió a preguntar.
Zoey, al ver el silencio, recorrió con la mirada al grupo de sirvientes y dijo con voz fría: —¿Entienden todos lo que quiere decir mi padre? Ella es la segunda hija que vivirá con nosotros en el futuro. Ustedes serán quienes la sirvan. ¿Lo enti