3 meses más tarde
Punto de vista Maximiliano
Finalmente regresé a la mansión después de una larga estancia en el hospital, pero lo hice con una sonrisa de oreja a oreja. Los médicos habían sido pesimistas, asegurando que no volvería a caminar, y sin embargo, ahí estaba yo, dando pasos lentos pero firmes.
Aunque necesitaba apoyarme en un bastón y caminaba muy despacio, mi recuperación avanzaba de manera satisfactoria. Estos tres meses habían sido cruciales para mi vida, llenos de eventos significativos.
Primero, la pancita de Madison ya estaba notablemente crecida, y sus hormonas también se notaban. Decidimos esperar hasta el nacimiento de nuestro bebé para conocer su sexo; queríamos que fuera una sorpresa.
Afortunadamente, confirmé que mi padre había fallecido a causa de un paro cardíaco, una muerte natural que esperábamos desde que supimos de su enfermedad. No murió en la explosión que causó Samantha en su casa.
Manuel y Mérida, mis sobrinos, se convirtieron en los herederos unive