En casa de Victoria Montenegro...
Victoria estaba sentada frente a la ventana, los dedos entrelazados, la mirada fija en el horizonte. La conversación con Héctor de unos días atrás aún resonaba en su mente. Todo estaba tomando forma, como piezas de un rompecabezas que finalmente encajaban. Uno de los hombres que tenía vigilando a Alexandro y Vanessa había informado sobre una charla con Emilia. Ese detalle, tan aparentemente insignificante, había sido clave.
Flashback
Héctor entró a la oficina con cautela, cerrando la puerta detrás de él. A pesar de los años que llevaba al servicio de la familia Montenegro, nunca se acostumbró a estar frente a Victoria. Había algo en su mirada que le transmitía la sensación de estar parado en el borde de un abismo.
—¿Me mandó a llamar, señora Montenegro? —preguntó con voz contenida, mientras se mantenía a una distancia prudente.
Victoria no le dio tiempo a asentarse. Con movimientos calculados, deslizó un sobre grueso hacia él, sin apartar la mirada.
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