Capítulo 63

Tras mucha insistencia de Marco y la forma en la que el doctor le aclaró que ella también necesitaba reposo para recuperarse de todo lo que había sucedido, Nara no tuvo más remedio que regresar a casa con Lina. Su amiga era la encargada de cuidarla y la habían hecho prometer que no la dejaría sola ni por un momento. Marco también había dispuesto un par de guardaespaldas para que se quedasen constantemente con ella.

–Está claro que ahora eres alguien importante –le dijo Lina en modo de broma–. Incluso tienes escoltas.

–Voy a hablar con Marco para que los llame de regreso, eso me parece una exageración.

–A mí no. Después de lo que te sucedió, ¿aún te atreves a decir que él está exagerando? Están ambos vivos de puro milagro, pudo haber muerto uno de los dos, o incluso ambos –Lina hablaba en un tono muy serio ahora–. Sabía que Neida era alguien despreciable, pero ni siquiera yo creí que llegase a tanto.

–No quiero hablar de ella –le dice Nara–, ya ha robado demasiado de mi ti