Mundo ficciónIniciar sesiónEl exquisito perfume de los productos con los que se aseó, inundaron mis fosas nasales: Vestigios de cedro, cítricos y musgos que dejaban sus hombros al rozar mi piel. Aunado al sabor marino de su cuerpo. Mis sentidos se nublaban ante su exquisito sabor y olor. El sol se filtraba entre nuestros cuerpos como si nos espiara, envuelto en sal y deseo. La sábana, empapada de jugo y sudor, se adhería a nuestros cuerpos húmedos por el mar.
El vestido negro, tirado a un lado, parecía más una flor marchita que una prenda. Los aperitivos quedaron mudos, olvidados junto al temblor que aún me subía por las piernas.
Su piel estaba fría y sus caricias enviaron escalofríos por todo mi cuerpo. Sentía como mi corazón latía enloquecido y el suyo martilleaba contra mi pecho, una extraña emoción me invadía y nublaba mi mente. Extasiada, yo tamb







